Inundaciones y deslaves provocados por las intensas lluvias han dejado siete muertos en Guatemala, donde las autoridades de protección civil anunciaron este lunes el envío de ayuda humanitaria a varias regiones del país.
Julio Sánchez, vocero de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), dijo a periodistas que las constantes lluvias han «saturado» los suelos en la mayor parte del territorio guatemalteco.
«Esto representa alto riesgo de desbordamiento de ríos, derrumbes y deslizamientos en laderas de barrancos y cerros», declaró Sánchez.
De acuerdo con la Conred, desde que inició la temporada de lluvias en mayo, han sido afectadas unas 50.000 personas por el cierre de caminos y la suspensión de servicios básicos, además de 705 con daños en sus viviendas y 850 que han sido evacuadas de sus casas.
Las emergencias de los últimos días se han reportado principalmente en los departamentos de Jalapa, El Progreso e Izabal.
Sánchez señaló que las fuertes lluvias continuarán en el país debido a un sistema de baja presión que «se fortalece» en el Atlántico, cerca de las costas de Belice y el sureste de México.
El año pasado unas 15 personas murieron en el país durante la temporada de lluvias que empieza en mayo y finaliza en noviembre.