La reconocida organización no gubernamental Fe y Alegría condenó la supuesta existencia de grupos de exterminio en El Salvador como método para erradicar la violencia de las pandillas, aseguró el director de la entidad, Saúl León.
«Es preocupante que la sociedad se desborde y pida que se utilicen métodos violentos para acabar con la violencia (…) nosotros estamos en contra de que se violenten los derechos de las personas, ya sean delincuentes o no, porque todos tenemos derechos como ciudadanos», manifestó León.
El director de Fe y Alegría enfatizó que aunque exista un repunte de criminalidad en el país «no estamos de acuerdo en medidas extrajudiciales y condenamos estos actos porque violencia engendra violencia».
La procuradora de Derechos Humanos, Raquel Caballero, dijo el pasado mes que investiga al menos 40 ejecuciones extrajudiciales supuestamente perpetradas por miembros de la Policía y el Ejército en 2017.
Estas se suman a las 119 supuestas ejecuciones extrajudiciales cometidas por los cuerpos de seguridad en diversas reyertas con presuntos miembros de pandillas entre 2013 y 2016, cuyas indagaciones en la PDDH inició el antecesor de Caballero, David Morales.
Una encuesta de la jesuita Universidad Centroamericana dada a conocer el pasado 24 de julio da cuenta de que más del 30 % de los salvadoreños aprueban la utilización de la tortura y las ejecuciones extrajudiciales de presuntos delincuentes o pandilleros.