La reunión de gabinete ampliado convocada para el martes por el presidente Salvador Sánchez Cerén en la Casa Presidencial, resultó un “cohete soplado”.
Luego de la reunión, el mandatario rindió una breve conferencia de prensa para anunciar que ha iniciado «un proceso de cambios de políticas y funcionarios».
En la conferencia, donde no se le permitió hacer preguntas a la prensa, no hubo aviso de cambio alguno, tal como el presidente dijo que haría la semana pasada.
“Hemos elaborado propuestas, ha sido una reunión muy profunda de lo que como gobierno nos toca asumir después de los resultados electorales», dijo el mandatario.
Con el aviso del presidente, la población y en especial los miembros del oficialista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) se quedaron esperando y con «un palmo de narices».
Sin embargo, el Presidente informó que en la reunión los ministros entregaron sus cartas de renuncia, sin que fueran aceptadas ni rechazadas.
Sánchez Cerén indico a la prensa que se creará un consejo que estará encabezado por el vicepresidente Óscar Ortiz y compuesto por el secretario de Comunicaciones, Eugenio Chicas y el secretario Técnico, Roberto Lorenzana, para analizar los movimientos a realizar.
