En un giro inesperado, el presidente electo de El Salvador se alejó de manera definitiva de las dictaduras de izquierda latinoamericanas.
Nayib Bukele aseguró el miércoles que su país no quiere «ayuda» de Estados Unidos, sino hacer «negocios» con las empresas de este país para lograr un cambio «sólido» que permita reducir la violencia y crear oportunidades económicas.
Bukele pronunció en el centro de pensamiento Heritage Foundation, en Washington D.C., su primer discurso público desde que fue elegido presidente de El Salvador el pasado 3 de febrero.
Frente a más de un centenar de personas, Bukele adelantó que cambiará las relaciones con Washington cuando tome posesión de su cargo el 1 de junio y afirmó que tratará de revitalizar los intercambios comerciales entre las dos naciones para promover el crecimiento económico de El Salvador.
«Nosotros, no queremos ser ayudados, queremos hacer negocios con ustedes», subrayó Bukele.
«La realidad es que EE.UU. nos puede mandar mil millones de dólares, pero no provocará una gran diferencia. Pero, si EE.UU. comienza a hacer negocios con nosotros, entonces, eso provocaría un gran cambio que sería solido y permitiría crear trabajos reales», afirmó.
Solo en 2017, El Salvador y EE.UU. intercambiaron bienes por valor de 5.500 millones de dólares, una relación comercial que benefició sobre todo a la parte estadounidense, que ostentó un superávit de 830 millones de dólares, según datos de la Oficina del Representante de Comercio Exterior (USTR, en sus siglas en ingles).
En términos generales, Bukele cuestionó la relación labrada con EE.UU. por parte de los dos partidos que gobernaron El Salvador desde el fin del conflicto interno (1980-1992): el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquierda) y la Alianza Republicana Nacionalista (Arena, derecha).
«Hay algo muy importante, y por eso estamos aquí. La relación de El Salvador con EE.UU. se ha erosionado en los últimos diez años por temas de ideología o por falta de pragmatismo», manifestó.
«Nos olvidamos de que tenemos un tercio de nuestra población en EE.UU., que la moneda estadounidense es la nuestra, que el 80 % de nuestras exportaciones tienen como destino Estados Unidos y que el 80 % de nuestras importaciones vienen de EE.UU.», añadió Bukele.
Según el centro de investigación Pew, la comunidad salvadoreña en EE.UU. ha crecido un 33 % desde 2007 y, actualmente, supera los 1,95 millones de personas, la mayor comunidad de salvadoreños en el exterior.
Bukele, de visita en Washington, tiene previsto mantener reuniones mañana en el Departamento de Estado.