Los diputados del Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) hicieron desordenes durante la sesión plenaria de la Asamblea Legislativa en la madrugada del martes. Los diputados de la fracción roja le gritaron «dictador» al presidente de la Asamblea, Mario Ponce, mientras golpeaban los curules.
Los desordenes fueron provocados durante la votación para la aprobación de una ley de cuarentena y la autorización de $1,000 millones para aliviar las finanzas del Estado e impulsar la recuperación económica de las empresas que han sido afectadas por el cierre por la pandemia de coronavirus.
La ley y la autorización para el nuevo endeudamiento fueron ambas autorizadas por los diputados durante la madrugada.
“Es un exceso, una arbitrariedad y podría ser una configuración de delito. La situación se está complicando con el Gobierno porque nos está poniendo a los ciudadanos en una situación de sometimiento a tortura y tratos inhumanos, básicamente el delito de lesiones dice que aquel que contagiara dolosamente configura tal acción y aquí se está cumpliendo esta situación, porque alguien que no es Covid-19 positivo y va a un centro de cuarentena obligatorio donde sí hay pacientes coronavirus positivo, básicamente lo están condenando al contagio. Es bien peligroso”, dijo la diputada Marcela Galeas con respecto a la ley de cuarentena.
La sesión plenaria 11 fue convocada con un «punto único» que era la aprobación de la ley de cuarentena, por lo que el presidente del Órgano legislativo procedió a cerrarla y a abrir la sesión plenaria 12, con el objetivo de votar la autorización de los $1,000 millones en endeudamiento del Estado.
La apertura de la nueva sesión desató una serie de reclamos y golpeteo sobre los curules por la fracción efemelenista.
El subjefe de fracción del FMLN, Schafik Hándal, pidió la palabra para espetarle al presidente Ponce “Usted ha violado todos los procedimientos internos. Usted se está ganando el título de dictador legislativo”. El resto de los diputados pertenecientes a la ex guerrilla se apresuró a gritar en coro “pacto de corruptos, pacto de corruptos”, mientras abatían sus curules con la palma de sus manos.
Sin embargo, la sesión 12 continuó y la adquisición de los $1,000 millones fue autorizada.
