El presidente de la República, Nayib Bukele, restó validez en su cuenta de Twitter a los decretos aprobados el miércoles por la Asamblea Legislativa asegurando que no tienen vigencia.
Los diputados del Primer Órgano del Estado aprobaron con 65 votos y con dispensa de trámite la pieza de correspondencia 1-A, en la que se indicaba que lo aprobado permitía a toda empresas de alimentos y bebidas poder realizar sus operaciones a pesar de la cuarentena domiciliar obligatoria.
Por lo tanto, las empresas DIANA y Bocadeli podían seguir trabajando.
Además del decreto mencionado, los diputados aprobaron otros varios relacionados con la emergencia del COVID-19, uno para que el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS) continúe atendiendo a personas despedidas o con contratos suspendidos. Otro que prohíbe que los médicos atender a los pacientes con sospechas o confirmación de tener COVID-19 si no tienen el equipo de protección adecuado.
Además, los diputados aprobaron disposiciones transitorias para restringir temporalmente la importación de los productos lácteos provenientes de Centroamérica por el 40 % mientras dure la emergencia.
También se aprobó una reforma para incluir a más personas en el beneficio de suspensión de pagos de agua, electricidad y telefonía.
Bukele sostuvo que, hasta que él no sancione los decretos no tienen vigencia, por lo tanto, quien «intente violar la ley “amparándose” en un decreto no vigente, será sancionado».
La posición del Ejecutivo fue reflejada la mañana del jueves, cuando unidades policiales y militares rodearon las dos empresas principalmente afectadas por la decisión presidencial, DIANA y Bocadeli.
Desde las seis de la mañana, policías y militares se apostaron alrededor de las instalaciones de ambas empresas en Soyapango. De acuerdo a una oficial consultada por periodistas, la misión era verificar que las labores de las fábricas se mantuvieran suspendidas y que la orden emanaba de la Casa Presidencial.
Si bien las autoridades no ingresaron a las instalaciones de las empresas, permanecieron varias horas frente a los portones de acceso de las instalaciones, impidiendo, en el caso de DIANA, que la empresa movilizara algunos furgones que estaban listos a salir para distribuir productos que se encontraban en las bodegas.
Luego de los hechos, el analista político Carlos Araujo escribió en su cuenta de twitter fuertes críticas contra Bukele.
