El Instituto de Medicina Legal «Roberto Masferrer» desmintió las declaraciones del director de la Policía Nacional Civil (PNC), Howard Cotto, y aseguró que la agente policial Lorena Beatriz Hernández destacada, en la sección 911 de Mejicanos, supuesta «suicida”, tenía tres heridas que le produjeron la muerte el pasado fin de año; una en el cráneo, otra en el tórax y una tercera en el abdomen.
«El comprobante con el cual Medicina Legal entregó a parientes el cadáver de la policía Lorena Beatriz Hernández, quien supuestamente se suicidó el fin de año afirma, en forma clara y precisa. que el cadáver de la policía Hernández presentaba tres heridas; una en el cráneo, otra en el tórax y una tercera en el abdomen» según fuentes de la PNC y de la familia de la víctima.
La policía Hernández fue enterrada este miércoles en el cementerio municipal de Izalco, departamento de Sonsonate.
El director de la Corporación Policial, Howard Cotto aseveró el martes a periodistas que la versión de que se trataba de un homicidio pasional, era falsa, pero informó que se ha arrestado al agente Alfonso Mejía Coto, tras el hallazgo del cadáver de Hernández en los dormitorios de la subdelegación policial en la colonia Zacamil, en Mejicanos.
De acuerdo a informes preliminares, la agente Hernández tenía relaciones sentimentales con Coto y habría discutido con este minutos antes de su muerte.
El hecho ha provocado expectación especialmente por que las declaraciones iniciales del Director de la PNC, Howard Cotto, fueron completamente falsas.
Por otra parte, también desmintiendo a Cotto, el inspector de la Policía, Jaime Palma, afirmó que el arma de la mujer no fue disparada «por lo tanto, deja de considerarse un suicidio y se investiga el homicidio”.
Se desconoce el porqué las declaraciones del director Cotto se contradicen con las evidencias, así como con los detalles de la escena que muestra a la agente Hernández con la cabeza sobre su pistola de servicio, sin haberla percutado; es decir, que no fue disparada.
Además, existen versiones según las cuales en el peritaje practicado al cuerpo de la víctima no hay restos de pólvora en sus manos.
