El expresidente Elías Antonio Saca (2004-2009), en prisión preventiva desde hace ya casi un año, será acusado del delito de «cohecho activo» por supuestamente sobornar a una empleada del tribunal civil en el que afronta un juicio por enriquecimiento ilícito, informó la Fiscalía General de la República.
Saca afronta un proceso civil ordenado por la Corte Suprema de Justicia por el supuesto incremento injustificado en más de 4 millones de dólares en su patrimonio y el de su esposa, Ana Ligia de Saca.
El ente también indicó que la mañana del lunes fue arrestada, en el marco de una operación con la que busca desmantelar una red de corrupción en los Tribunales, una empleada judicial -no identificada- que «filtraba información del caso que se le sigue en el área civil» a Saca.
Esta acusación se sumará a las de peculado, agrupaciones ilícitas y lavado de dinero que afronta Saca y por las que guarda prisión preventiva por supuestamente malversar 246 millones de dólares del presupuesto estatal durante su mandato, las cuales luego de dos años de investigación fiscal no han podido ser sustentadas de manera robusta por el Ministerio Público.
Según la Fiscalía, Saca y sus exsecretarios privado, de Comunicaciones y de Juventud, Elmer Charlaix, Julio Rank y César Funes, respectivamente, y otros 3 colaboradores tenían una estructura dentro de la Presidencia que movió el dinero a 14 cuentas personales, de las que posteriormente retiraron 116 millones de dólares «en efectivo».
La Fiscalía tuvo seis meses luego de una larga investigación para sustentar sus acusaciones, sin embargo, al término de seis meses más de tiempo para robustecer sus acusaciones, pidió otros seis meses pues su prueba no era aún suficiente, por lo que los acusados habrán estado presos al menos un año antes de haber sido juzgados y encontrados culpables o inocentes.
La nueva acusación contra Saca fue informada por el jefe de la Unidad Especializada Contra el Crimen Organizado, de la FGR, Wil Ruiz.
