Las operaciones de bitcóin de El Salvador agregan riesgo a una perspectiva de crédito soberano que ya era débil y refleja una creciente posibilidad de default, de acuerdo con Moody´s Investor Service.
Las tenencias de bitcóin del Gobierno “ciertamente se suman a la cartera de riesgo”, dijo el miércoles el analista de Moody’s Jaime Reusche, en una entrevista telefónica.
Operar con bitcóin “es muy arriesgado, particularmente para un Gobierno que ha estado luchando con presiones de liquidez en el pasado”, señaló.
El presidente Nayib Bukele ha dicho que comercializa la criptomoneda usando su teléfono, aunque el Gobierno no publica datos sobre sus tenencias. Bukele compró algunas monedas antes de que El Salvador adoptara el bitcóin como moneda de curso legal en septiembre y, en ocasiones, aprovechó en los meses siguientes las caídas de precios para comprar más, según lo que ha dicho en publicaciones en Twitter.
La propiedad actual de El Salvador de aproximadamente 1.391 bitcoines no es lo suficientemente grande como para representar una amenaza importante para la capacidad del Gobierno de cumplir con sus obligaciones, pero el riesgo aumentará si este decidiera comprar más criptomonedas, dijo Reusche.
“Si aumenta mucho, representaría un riesgo aún mayor para la capacidad de pago y el perfil fiscal del emisor”.
A los precios actuales de la criptomoneda, las tenencias de bitcóin de El Salvador podrían haberse depreciado entre US$10 y US$20 millones, según estimaciones de Moody’s.
El ministro de Finanzas, Alejandro Zelaya, dijo la semana pasada que la adopción del bitcóin por parte de la nación ha atraído inversión extranjera a la nación, sin detallar a que tipo de inversión se refería.
El Salvador tiene un bono de US$800 millones con vencimiento en enero de 2023. Se cotiza a 78,8 centavos por dólar, lo que le da un rendimiento de más del 35%.
Los altos rendimientos han reducido el acceso del Gobierno a los mercados de bonos extranjeros, y la falta de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional aumenta el riesgo de incumplimiento del país, señaló Moody’s.
Bonos en bitcóin
En julio, la calificadora rebajó la calificación de El Salvador a Caa1, lo que refleja un “riesgo crediticio muy alto”. En su decisión, Moody’s citó un “deterioro en la calidad de la formulación de políticas”.
Un crecimiento más lento en los flujos de remesas y la actividad económica este año afectará los ingresos del Gobierno, dijo Reusche, aunque una posible reforma de las pensiones y una propuesta de emisión de bonos en bitcóin podrían proporcionar un respiro.
La Administración de Bukele ha propuesto un bono denominado en dólares a 10 años por valor de US$1.000 millones emitido a través del sistema de liquidación de bitcóin de Blockstream conocido como Liquid Network, en lugar de los canales tradicionales.
Vender “una cantidad decente de bonos en bitcóin podría ayudarlos con sus presiones de liquidez”, señaló Reusche. Pero, “a menos que los bonos en bitcóin sean muy bien recibidos y suscritos en exceso, vemos que la probabilidad de que sea necesario reestructurar sus bonos del mercado tradicional está aumentando”.
