La Asamblea legislativa declaró el martes Estado de Emergencia Nacional por los daños que dejó el paso del huracán Bonnie, que ha causado inundaciones que provocaron la muerte de dos personas, pérdidas de cultivos, daños en viviendas y centenares de derrumbes.
Mientras, las torrenciales lluvias siguieron golpeando al país el martes por la noche.
El decreto por el plazo de quince días fue aprobado con los votos de 65 de los 84 diputados. Los legisladores de los partidos políticos opositores no lo apoyaron ya que argumentaron que el Estado ya tenía a su haber al menos $700 millones para emergencias durante 2022.
Con este decreto, la Administración del presidente Nayib Bukele puede hacer uso de todos los recursos que quiera sin el aval del Congreso, y podrá hacer compras directas sin aplicar la Ley de Adquisiciones y Contrataciones de la Administración Púbica (LACAP).
Se espera que, tal como ha sucedido con todos los gastos del Gobierno en la actual Administración, los nuevos gastos por la emergencia también sean puestos como «secreto de Estado» por los próximos 7 años.
El paso de Bonnie por el territorio nacional ocasionó la muerte de dos personas, dejó decenas de personas damnificadas, provocó daños en más de 150 viviendas, afectó las nuevas remodelaciones en dos hospitales públicos y dañó la infraestructura de calles y carreteras. Además dejó un socavón en una quebrada utilizada para construir la colonia Brisas de San Francisco, exactamente en la misma área donde el actual gobierno realizo reparaciones hace pocos meses.
Además, Bukele anunció que se mantenía la suspensión de clases en todas las escuelas, colegios y universidades públicas y privadas y llamó a la población a tomar las precauciones ante el anuncio de que continuarán las lluvias que ya afectan al país desde el fin de semana.
“La saturación en los suelos se encuentra en niveles muy altos y una onda tropical ha ingresado a nuestro país, lo que incrementa el riesgo de derrumbes y deslizamientos”, dijo el mandatario en su cuenta de Twitter.
Entretanto, el ministro de Medio Ambiente, Fernando López, advirtió en conferencia de prensa que “tenemos una onda tropical activa, una serie de nubes arrastradas por el viento del este, lo que significa mucha lluvia en forma de tormentas, no es temporal, sino un aguacero, con probabilidad de tormentas eléctricas e inundaciones”
El Observatorio Ambiental del Ministerio del Medio Ambiente reportó que el país ya está afectado por “tormentas de fuerte a muy fuerte intensidad, con ráfagas de viento y actividad eléctrica abundantes acompañan el desplazamiento”.
Por su parte, el presidente de la Comisión Nacional de Protección Civil y ministro de Gobernación, Juan Carlos Bidegain, dijo que el gobierno ha habilitado 30 albergues para resguardar a la población que sea evacuada ante la situación climática.