La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), responsable de movilizar y coordinar la respuesta de actores humanitarios ante emergencias, aseguró que para 2024 en El Salvador al menos 942 mil personas a partir de febrero hasta mayo 2024 necesitarían socorro alimentario.
El Informe Mundial sobre las Crisis Alimentarias 2023 muestra que el 52 % de los salvadoreños tuvo durante el 2022 una fase de “estrés alimentario”, equivalente a 3.3 millones de personas, mientras un 13 por ciento están en fase de “crisis alimentaria” (823 mil personas), y el uno por ciento en fase de “emergencia alimentaria” (63 mil personas).
La mayoría de hogares salvadoreños enfrentan una Canasta Básica Alimentaria con un incremento “incesante” entre 2019-2023. En el área urbana pasó de 200.02 a 252.4 dólares en su promedio anual (26.19 por ciento más); mientras en el área rural pasó de 144.48 a 189.43 dólares (31.11 por ciento más) en el mismo período.
Cada vez hay menos personas activas en el campo y menos manzanas cultivadas en maíz y frijol.
El Salvador produjo 429 mil quintales de hortalizas menos en el ciclo 2022-2023, para acentuar las carencias alimenticias de la población e incrementar los precios.
Por otra parte, el cambio climático empuja a la reducción de la producción, una situación a la que se suma el encarecimiento de la tierra y el aumento en el costo de la mano de obra.