El cambio del paquete de ayuda a los productores por 150 dólares a una tarjeta de 75 dólares ha incidido en el pronóstico de producción de granos básicos para la próxima cosecha en El Salvador.
De acuerdo al presidente de la Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo), Luis Treminio, es recomendable volver a los paquetes agrícolas que promueven la semilla nacional.
Treminio lamentó en una entrevista televisada que los productos nacionales tengan que competir, por ejemplo, con el maíz transgénico que se importa de Estados Unidos, lo cual ata a los productores al paquete de las transnacionales incluyendo fertilizantes y otros insumos.
El dirigente del agro salvadoreño aseguró que los agricultores no sembraron más porque el gobierno no dio la semilla necesaria, y por eso, entre otras causas, habrá un déficit productivo de cerca de 225 mil quintales de frijoles.
En sus declaraciones, el directivo dijo que ahora la pupusa, el platillo nacional, es americana y nicaragüense porque se utilizan insumos importados. Estados Unidos es el principal proveedor de maíz, mientras que de Nicaragua provienen los lácteos, agregó.
Como resultado de la crisis, actualmente en el mercado salvadoreño no se distribuye muchos frijoles nacionales porque la producción se redujo desde hace varios ciclos agrícolas.
“La crónica de una escasez anunciada se está dando, en los mercados ya no hay frijol nacional, todo el frijol que se consume es frijol principalmente de Nicaragua”, indicó el directivo de Campo.
Treminio aseguró que el país es un “importador de alimentos” que depende de un 93 por ciento de las hortalizas y verduras que proceden de Guatemala, un 33 por ciento del maíz estadounidense y mexicano, y de un 23 por ciento de los frijoles nicaragüenses.