La mexicana América Móvil, del multimillonario Carlos Slim, dijo el lunes que estaba auditando a su unidad en Guatemala tras una investigación sobre pagos hechos por un exdirectivo de la gigante de las telecomunicaciones.
La policía de Guatemala arrestó el viernes a 17 sospechosos de estar involucrados en una red de lavado de dinero y financiamiento electoral ilícito, supuestamente dirigida por el exministro de Comunicaciones e Infraestructura Alejandro Sinibaldi, quien ha estado prófugo desde junio del 2016.
Durante una investigación realizada por la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un organismo respaldado por Naciones Unidas, se encontró evidencia de pagos realizados por Telecomunicaciones de Guatemala (Telgua), una subsidiaria de América Móvil y dueña de la marca Claro, a una cuenta de Sinibaldi.
Un portavoz de América Móvil dijo que la empresa estaba auditando Telgua para descubrir el por qué de los pagos.
«Estas aportaciones las permite la ley guatemalteca. Lo que nosotros estamos buscando es saber por qué hicieron estas aportaciones sin observar estas normas y requisitos que establece la ley en Guatemala», dijo el portavoz.
Entrevistas con un exejecutivo de Telgua revelaron que los pagos tenían por objeto asegurar a la empresa un trato favorable en una disputa con Tigo, dijo la CICIG.
El exejecutivo asumió la responsabilidad por los pagos y la empresa no se benefició de su actuación, dijo el portavoz de América Móvil.
«La disputa comercial entre Telgua y Tigo se resolvió por un acuerdo entre particulares (…) sin la intervención de autoridad guatemalteca alguna», dijo el portavoz.
Un portavoz de Tigo no respondió de inmediato a una petición de comentarios de la prensa.
Sinibaldi fue ministro de Comunicaciones e Infraestructura durante el gobierno del encarcelado expresidente guatemalteco Otto Pérez Molina, quien dejó el poder en 2015 tras una investigación liderada por la CICIG sobre su participación en un escándalo de corrupción.
Sinibaldi creó una serie de empresas fantasmas para lavar el dinero que cobró en sobornos a constructoras proveedoras del Estado, y parte de ese dinero también habría financiado al Partido Patriota, de Pérez Molina, dijo la CICIG.