La rusa Maria Sharapova disputará por primera vez en dieciocho meses un Grand Slam tras recibir una de las invitaciones (‘Wild card’), del US Open que comenzará el próximo 28 de agosto en Nueva York.
La tenista siberiana, campeona de este torneo en el 2006, formará parte del cuadro principal de un ‘major’ desde el Abierto de Australia del 2016, cuando dio positivo por dopaje.
Sharapova, de 30 años, que acumula entre sus éxitos cinco del Grand Slam (Abierto de Australia, Abierto de Estados Unidos, Wimbledon y, en dos ocasiones Roland Garros), es una de las siete tenistas que han recibido una invitación de la organización del torneo.
La jugadora rusa actualmente fijada por la WTA en el puesto 148 del ránking, no podría clasificar por su bajo puesto, pero los organizadores decidieron invitarla por su nivel. Esto ya había causado indignación en el Abierto de Madrid de este año, ya que su mala clasificación se debe a la suspensión impuesta por el TAS de 15 meses sin jugar por haber dado positivo en un control antidopaje en 2016.
En aquel entonces, tenistas como Andy Murray, Roger Federer, Caroline Wozniacki y Cibulkova Dominika, se habían mostrado en contra de que sea invitada a participar de este tipo de certámenes.
