Tras conocerse la renuncia de Hernán Rincón a la presidencia de Avianca Holdings y el cambio de la junta directiva, hoy se conoció que Anko Van Der Werff, quien dejó la semana pasada la dirección ejecutiva de ingresos de Aeroméxico, recibió una oferta para darle la vuelta a Avianca que está metida en una complicada situación financiera.
Anko Van Der Werff es de origen holandés y cuenta con varios años de experiencia en la industria aeronáutica. Entre los cargos que ha ocupado se destaca el de executive vice president & chief commercial officer del Grupo Aeroméxico y el de vicepresidente encargado de pricing en Qatar Airways.
Según información de Aeroméxico, «hace tres años Anko llegó a México con motivaciones claras para empezar a construir las renovaciones necesarias para hacer de Aeroméxico uno de los mejores lugares para trabajar. Y cuando los tiempos difíciles se acercan y los obstáculos se presentan, siempre se pregunta: ¿qué es correcto hacer?»
Sus objetivos de trabajo y estrategia, llevaron a que los empleados de Aeroméxico señalaran que el ejecutivo «generó un cambio en la cultura organizacional para que haya apertura y aceptación de ideas que no son convencionales».
El ambiente interno de la aerolínea es uno de los puntos claves que según los analistas se necesita trabajar en Avianca Holdings. De acuerdo a un especialista del sector, «la compañía necesita alguien que recomponga el tejido que quedó mal desde el tema de los pilotos”.
Pero, el reto no solo está en mejorar el relacionamiento de la compañía con sus públicos internos, sino que es clave para que la aerolínea de 100 años, vuelva a tener como centro de su funcionamiento a los clientes porque en últimas el servicio fue lo que llevó a posicionar a Avianca como una de las mejores aerolíneas no solo de Colombia, sino de la región, dijo Gilberto Salcedo, expresidente de Atac, quien también dijo que “el principal reto que tiene el nuevo equipo es rentabilizar la operación y así los resultados, porque los del año pasado no fueron los más destacados, también debe optimizar sus activos y vender lo que no está relacionado con su negocio”.
Además de mejorar la cultura organizacional de la mexicana, Anko fue el mentor de movidas como la alianza con Delta, la transformación del enfoque de Aeroméxico a uno más global, con más rutas que generen más empleos y la promoción de nuevos productos con nuevas maneras de comunicación, como la digital.
La decisión se confirmará el martes, luego de que la nueva junta directiva, que está liderada por Roberto Kriete, termine su primera reunión oficial. Según fuentes cercanas a la compañía, durante el encuentro se tocarán varios temas entre los que se destaca la hoja de ruta del nuevo CEO, que estará encargado de continuar con el plan de transformación que dio a conocer la firma colombiana a principio de año.
Vale la pena resaltar que en los últimos meses la aerolínea de origen colombiana ha protagonizado varias noticias entre las que se destaca el relevo de la junta directiva, la caída del precio de la acción y la posibilidad de que United Airlines tomará el control definitivo como consecuencia del préstamos de US$456 millones a Synergy, empresa de Germán Efromovich, quien es dueño de más de la mitad de las acciones del holding por medio de Synergy Aerospace Corp, ahora BRW Aviation.
Anko no solo llega en un momento en que la aerolínea no está pasando por su mejor momento, sino que toma el cargo en medio de un plan de transformación que tiene como pilares: el mejoramiento de indicadores, el ajuste del plan de flota, la desinversión de activos estratégicos y la optimización de gastos.
El holandés estará al mando de la aerolínea que cuenta con un equipo de 18.960 colaboradores, presencia en 27 países con 105 destinos, 292.599 vuelos al año, 30.502.536 pasajeros transportados en 2018 y otras cifras que hacen atractiva a la aerolínea en el mercado aéreo y que la han llevado a cumplir 100 años de operaciones.
A pesar de que dentro de los posibles candidatos para ocupar este cargo se encontraban nombres como Santiago Diago y Gerardo Grajales, quienes fueron candidatos internos en la selección pasada, según le dijo un experto del sector a LR; este panorama cambió, debido a que semanas después de la renuncia de Rincón, la junta directiva del momento abrió la puerta para que el próximo CEO no necesariamente fuera de origen local como estaba consignado en los estatutos de la compañía.
A partir de ese momento, muchos expertos señalaron que esta decisión se tomó porque el perfil del nuevo CEO tenía que cumplir varios requisitos como el de tener más de 10 años de experiencia en el sector, los cuales no se encontraron a nivel local, por lo que la junta directiva se vio en la necesidad de tener en cuenta candidatos internacionales.
Con información de La República