El Salvador regresa a los mercados internacionales de deuda con una oferta de dos tramos, que incluye un bono que pagará a los inversionistas una tasa de interés más alta a menos que el Gobierno pueda obtener mejoras crediticias o un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En el primer tramo, El Salvador recaudará deuda en dólares con vencimiento en 2030 y las negociaciones iniciales contemplan el precio en la zona baja del 12%, que se amortiza a partir de 2028, según fuentes con conocimiento directo.
La otra oferta es un bono de solo intereses (interest only) con un cupón vinculado a la calificación crediticia de la nación o al éxito que logre en sus negociaciones con el FMI. Si El Salvador no obtiene al menos dos mejoras a una calificación de B, que está cinco escalones por debajo del grado de inversión, o no logra un acuerdo para un paquete de préstamos con el FMI antes octubre de 2025, el cupón aumentará, según señalaron las personas, que pidieron no ser identificadas porque no están autorizadas a hablar al respecto
Es el primer acuerdo de bonos en casi cuatro años para el prestatario con calificación “basura” y se produce tras un amplio repunte de la deuda de El Salvador.
Parte de los ingresos de la operación se utilizarán para ayudar a financiar una recompra de los bonos existentes con vencimiento en 2025, 2027 y 2029, que en conjunto tienen un total de US$1.750 millones en circulación. No está claro cuánto ofrece recomprar el país. La oferta de recompra expira el 15 de abril a las 5 p.m. en Nueva York.
BofA Securities Inc. gestiona ambas operaciones.
Desde julio de 2022, la deuda de El Salvador ha registrado una rentabilidad del 215%, la mejor del mundo, gracias a que el Gobierno del presidente Nayib Bukele llevó a cabo dos recompras de bonos, refinanció títulos locales a corto plazo y organizó un canje de deuda de pensiones. El repunte ha perdido fuerza recientemente en medio del deterioro fiscal y la disminución de las esperanzas de un acuerdo inminente con el FMI.
Fitch Ratings y Moody’s Ratings ubican a El Salvador siete escalones por debajo del grado de inversión, mientras que S&P Global Ratings lo sitúa un nivel por encima
La última vez que el país vendió bonos fue en el punto álgido de la pandemia, cuando colocó US$1.000 millones de deuda con un cupón del 9,5%. Desde entonces, solo cuatro países han pagado cupones más altos para vender bonos en dólares, según datos recopilados por Bloomberg.