El expresidente del Banco Central de Reserva (BCR), Carlos Acevedo, aseguró que el desafío económico que enfrentará el gobierno en el nuevo periodo presidencial de Nayib Bukele será “mucho más difícil” que el de las pandillas.
El economista explicó a periodistas que “la gente espera que una vez resuelto el acuciante flagelo de las pandillas ahora viene el tema de resolver el acuciante desafío de la economía, y yo pienso que eso va a ser mucho más difícil que lo de las pandillas”.
Según el experto en temas económicos, el problema de las pandillas se solventó a través de decretos, como el del régimen de excepción y operativos ordenados a la Fuerza Armada y la Policía Nacional Civil (PNC).
Sin embargo, aseveró, el problema económico va más allá y no se puede decretar un descenso en la inflación, o un incremento en las exportaciones, remesas y mucho menos inversión extranjera directa (IED).
Al opinar sobre el mensaje del presidente Nayib Bukele en su discurso de investidura cuando habló de “medicina amarga” para enfrentar los desafíos económicos, Acevedo entendió que definitivamente se refirió a ajustes fiscales, en donde pueden haber un aumento de los impuestos, acortar gastos, o ambas acciones.
“Yo pensaría que hay que aumentar ingresos porque los desbalances fiscales que se han mantenido hasta el momento a base de refinanciamiento, de deuda, ya esa vía está muy cerrada”, explicó el economista.
Con respecto al financiamiento por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), Acevedo considera que ni el FMI va a ceder ante el uso del Bitcoin por parte del gobierno Bukele, ni este cederá a las demandas del banco.
Con respecto al Banco Mundial (BM) y al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), El Salvador es una opción que se encuentra “cerrada” debido a la falta del acuerdo entre el FMI y el gobierno, aunque Bukele adelantó que las negociaciones con el Fondo avanzan.
Cerrados los mecanismos de endeudamiento y lo minados que se encuentran los Fondos de Pensión, ahora al país solo le queda el ajuste, la medicina amarga, que evitó aplicar el gobierno pero que ahora parece impostergable, puntualizó.