Sergio Ticas, presidente de la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal), aseguró que el sector cafetalero en el país se encuentra en cuidados intensivos, ante el abandono oficial de la agroindustria que otrora fuera la mas importante en el país y la más grande en Centroamérica.
El directivo obsevó que para los productores el mejor logro del primer gobierno de Nayib Bukele fue la seguridad, pero aseguró que la caficultura, que acompañó la economía por más de dos siglos, sigue esperando una política del gobierno de Nayib Bukele que ayude a reactivarla.
El sector espera que en el nuevo quinquenio se haga realidad la ejecución de una política que resuelva los principales problemas que acosan a los caficultores, que son principalmente «el endeudamiento y la renovación del parque cafetero con variedades resistentes al cambio climático y de mayor productividad», dijo.
Ticas sostuvo ante periodistas que pese a las promesas de una reestructuración de la deuda, que supera los 400 millones de dólares, a la fecha no se ha ejecutado un plan para mejorar el perfil de los productores. Acafesal asegura que no quieren dinero gratis, sino financiamiento en condiciones adaptadas a los riesgos del sector, precisó.
Por otra parte, apuntó que el país carece de una política que le permita recuperase de los efectos de la plaga del hongo de la Roya y citó el ejemplo de Honduras y Guatemala, países que siempre tuvieron una política cafetalera, tuvieron un instituto de investigación y transferencia de tecnología, y nosotros como El Salvador no teníamos ni política cafetalera ni un instituto en la pasada Administración.
«Esto ha generado un estancamiento y no podemos llegar al millón de quintales cuando ya Honduras sobrepasa ocho millones y Guatemala anda por siete millones de quintales», explicó.
Ticas acentuó que es “urgente” empezar a trabajar en una nueva política cafetalera, que necesita el apoyo del gobierno, «aquí hay que hacer equipo», acotó.