La Academia Sueca anunció el fin de semana que otro miembro -el séptimo ya- abandona la institución, agravando así una de las peores crisis del organismo que otorga el prestigioso Premio Nobel de Literatura.
La Academia se ha visto salpicada por las acusaciones de abusos sexuales hacia el marido de una de sus miembros. También se ha publicado que los nombres de algunos de los galardonados se filtraron antes de anunciarse públicamente, algo que afectaría a las apuestas que se realizan sobre quién será el ganador.
Las arcaicas reglas de la institución señalan que el cargo es vitalicio e irrenunciable, así que técnicamente nadie ha renunciado a la posición ni puede ser relevado.
“La Academia sueca quiere informar que Sara Stridsberg ha comunicado este 27 de abril que desea dejar sus deberes como miembro”, ha señalado el sábado el comité en un comunicado, sin dar más detalles.
A principios de este mes, la directora de la Academia, Sara Danius, y otros cinco miembros también anunciaron que se retiraban de la junta a raíz de la polémica. La renuncia de este sábado eleva el a siete el número de miembros que se desvinculan de una Academia formada por 18 personas.
Las arcaicas reglas de la institución señalan que el cargo es vitalicio e irrenunciable, así que técnicamente nadie ha renunciado a la posición ni puede ser relevado.
El rey sueco, Carl XVI Gustavo, anunció la semana pasada que cambiaría las reglas y haría posible la incorporación de nuevos miembros.
La crisis que envuelve al premio Nobel de Literatura ha provocado especulaciones de que el premio podría ser cancelado este año. Las selecciones del comité fascinan y a menudo desconciertan a los amantes de la literatura de todo el mundo.