Volaris reportó una pérdida neta de 39 millones de dólares en el tercer trimestre del año, aunque logró incrementar sus ingresos.
El guatemalteco Enrique Beltranena, presidente y CEO de la aerolínea, dijo que el desempeño de Volaris mostró resiliencia resultando en un crecimiento en los ingresos.
«Este crecimiento fue principalmente impulsado por un aumento en el volumen de pasajeros y un nivel récord de ingresos por servicios adicionales por pasajero».
«Logramos estos resultados manteniendo un fuerte control de costos, especialmente en gastos no relacionados al combustible», indicó.
Los ingresos operativos totales se ubicaron en 848 millones de dólares, un aumento de 10%.
La capacidad medida en asientos por milla disponibles se incrementó 8.2%.
Los gastos operativos totalizaron 809 millones, representando 95% de los ingresos operativos totales.
Mientras que el costo económico promedio de combustible disminuyó 20%, ubicándose en 3.17 dólares por galón.
Volaris comentó que se enfrenta al reto de las inspecciones preventivas y aceleradas de los motores GTF por parte de Pratt & Whitney.
«Estamos atendiendo proactivamente las inspecciones de motores, cuestión que se ha convertido en un asunto global, impactando a diversas aerolíneas.
«Asimismo, estamos trabajando de la mano de Pratt & Whitney para obtener la asistencia técnica necesaria y la compensación monetaria por los motores afectados», agregó Beltranena.
Volaris ha desarrollado un plan de mitigación para contrarrestar parcialmente el impacto.
El enfoque para 2024 será maximizar los ingresos unitarios y márgenes, mientras optimiza su red en la medida de lo posible.