La actividad telúrica se ha intensificado en el occidente del país, manteniendo en alerta a las autoridades y a la población. El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) ha reportado un total de al menos 228 sismos hasta el jueves (fecha de cierre de este reporte), localizados principalmente en la zona de Juayúa y sus alrededores, en el departamento de Sonsonate.
La concentración de sismos corresponde a un nuevo enjambre sísmico, un fenómeno característico de la alta sismicidad de El Salvador, provocado por la activación de fallas geológicas locales en la región.
- Epicentro Principal: Distrito de Juayúa y zonas aledañas, departamento de Sonsonate.
- Total de Sismos: Al menos 228 hasta el corte del jueves.
- Magnitudes: La mayoría de los movimientos telúricos han sido de baja magnitud, oscilando entre 2.0 y 3.5 en la escala de Richter, aunque algunos han alcanzado magnitudes perceptibles por la población.
- Perceptibilidad: Un número significativo de los sismos, aunque de baja magnitud, han sido sentidos por los habitantes de Juayúa, Salcoatitán y áreas cercanas debido a la poca profundidad de sus hipocentros (entre 2 y 8 kilómetros).
El MARN, a través de sus informes especiales, ha señalado que esta actividad es superficial y está ligada a la dinámica de fallas que atraviesan la cadena volcánica del occidente del país. Aunque la actividad ha mostrado fluctuaciones, la persistencia en el registro de sismos mantiene el monitoreo constante por parte de la Red Sísmica Nacional.
Ante el incremento de los movimientos, las autoridades de Protección Civil han emitido un llamado a la población para mantener la calma y poner en práctica las medidas de prevención necesarias:
«Es crucial que la ciudadanía se informe únicamente a través de canales oficiales del MARN y Protección Civil. Recomendamos a los habitantes de Juayúa y alrededores revisar la infraestructura de sus viviendas y tener preparado un plan familiar de emergencia. Evitar los rumores es esencial para prevenir el pánico,» indicaron voceros de la Dirección de Protección Civil.
Se ha activado el sistema de monitoreo en el occidente del país para identificar cualquier variación en el patrón del enjambre sísmico que pudiera indicar un cambio en su comportamiento o un incremento de riesgo. Las autoridades también están coordinando con las alcaldías locales para verificar la existencia de posibles daños menores en estructuras y responder a cualquier emergencia que pudiera presentarse.
Este fenómeno se suma a otros enjambres sísmicos registrados previamente en la zona occidental de El Salvador, como el que afectó al distrito de San Lorenzo, Ahuachapán, en meses anteriores, confirmando la alta vulnerabilidad sísmica de la región.
