La cúpula empresarial de Guatemala pidió a la Justicia que determine «pronto» la existencia o no de responsabilidades en las personas señaladas en un nuevo caso de corrupción, una red que supuestamente pagó más de 13 millones de dólares en sobornos.
«Es preciso que estos casos sean conocidos y diligenciados de tal forma que los tribunales de la República determinen pronto la existencia o no de responsabilidades de cada una de las personas señaladas», dijo en un comunicado el Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (Cacif).
El sector privado dijo que todos los implicados, incluso aquellas empresas agremiadas, deben esclarecer su situación ante los Tribunales y señaló que es «imprescindible» que Guatemala continúe con las acciones necesarias combatir la corrupción, «una constante demanda» del empresariado organizado «desde hace varios años».
Las autoridades dieron a conocer este viernes la existencia de una red de corrupción dirigida por el exministro de Comunicaciones de Guatemala Alejandro Sinibaldi (2012-2014) que operaban en la construcción de obras e infraestructura y que cobró sobornos por más de 13 millones de dólares a través de 3 empresas fantasmas a 8 conglomerados empresariales.
Por este caso, las autoridades arrestaron este viernes a 17 personas, citaron a 5 a prestar declaración y otras 15 son buscadas para su arresto, entre ellas el propio Sinibaldi, varios de sus familiares y amigos, así como empresarios y funcionarios de la cartera.
El exministro está acusado de asociación ilícita, lavado de dinero u otros activos, financiamiento electoral ilícito y cohecho pasivo, delitos que comparten otros de los acusados.
Entre ellos destaca Otto Vinicio Samayoa Soria, cuya familia lidera una de las constructoras más poderosas del país y cuyo hermano, Guillermo, fue diputado entre 2008-12 con el apoyo de Sinibaldi y también perteneció a la red.