La Real Academia Española (RAE) presentó este jueves 14 de diciembre el informe ‘La enseñanza de la lengua y la literatura en España, con especial atención al uso, el conocimiento y el aprendizaje del español’. El documento señala problemas en educación secundaria y bachillerato: poca memorización de los alumnos, «relajación» en el nivel de especialización del profesorado y el uso abusivo de nuevas tecnologías como Chat GPT.
En la presentación del informe en la sede de la academia estuvieron el director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, y otros cinco académicos que participaron en su elaboración. Muñoz Machado destacó que la propuesta busca mejorar el estado de la educación y no es un texto crítico contra nadie.
La Academia no quiere sustituir las obligaciones de las autoridades públicas o educativas ni enmendar la plana, solo busca que surja un debate público que abarque a la sociedad completa y ojalá sirva para un futuro Pacto de Estado por la educación», insistió, y añadió que enviarán este documento a instituciones educativas y públicas.
Santiago Muñoz Machado
El texto final, resultado de 15 informes colectivos de profesores de toda España y de otros internacionales (PISA), consta de 55 páginas. Analiza la situación de la enseñanza en España, destacando «las carencias» en la comprensión lectora y el conocimiento de lenguas cooficiales y extranjeras, y la «marginación» de lenguas clásicas.
Una conclusión del informe es que los resultados serían mejores si la preparación profesional en las técnicas de enseñanza de los especialistas en lengua y literatura se acompañara de un conocimiento más profundo de la materia.
Se ha relajado los niveles de exigencia y en el nivel de especialización del profesorado. Hace tiempo se introdujo en los institutos lo que se conocía como ‘asignaturas afines’, que permite que un profesor de lengua pueda dar latín. En la enseñanza secundaria el profesor de lengua es el que mejor clases de lengua imparte», remarcó Pedro Álvarez de Miranda, participante en el informe.
El informe también dedica un apartado a la memorización. «Se busca combatir la demonización de la memoria o su denostado papel: no se va a reclamar ninguna vuelta al memorismo en sí, pero tampoco pasar al extremo opuesto. En esto la enseñanza da bandazos y se busca evitarlos», resaltó.
La solución es un equilibrio entre contenido, memorización y competencias», defendió otro participante, Salvador Gutiérrez, mientras que la académica Carme Riera también apoyó un ‘punto medio’. «No se va a volver a pedir memorizar la lista de los reyes godos, pero la memoria es importantísima y se debe utilizar», afirmó.
El documento recoge que la disyuntiva sobre más memorización ha recibido «respuestas enfrentadas». «Por un lado se sostiene que conocer aproximadamente el argumento de ‘La vida es sueño’ o ‘La divina comedia’ es importante para la cultura media, sin que obligue a leer textos. Por otro, se considera que la memorización de argumentos de obras no leídas –demandadas hoy por algunas comunidades en la EVAU– es una tarea escasamente útil».
También se aborda los efectos negativos de la «universalización de lo inmediato», refiriéndose tanto al uso de Chat GPT como del ‘efecto Google’. «Es tarea fundamental de la educación convencer a los jóvenes de que el objetivo de estas herramientas no es sustituir nuestro pensamiento, sino ayudar a elaborarlo mejor».
El documento apunta que los alumnos a menudo creen que los procesadores de texto corrigen muchas faltas de ortografía y pronto dirán que los desarrollos recientes de la IA hacen innecesario aprender a resumir informaciones u ordenar ideas. Además, menciona el ‘efecto Google’ en las aulas, que «conduce a la confusión entre información y conocimiento». «Los alumnos tienen acceso a casi cualquier información, pero no son capaces de seleccionar la que es verdaderamente relevante».
¿Qué opina ChatGPT? ¿Tienen razón los académicos de la RAE? Le preguntamos
Y aunque titubueó, porque ChatGPT, de Open AI, tuvo que recurrir hasta a un tercer intento para resolver la incógnita, finalmente, pasado el coraje, nos la brindó.
Es esta:
La preocupación de la Real Academia Española sobre el uso de tecnologías como ChatGPT en la educación refleja un debate en curso sobre el impacto de la inteligencia artificial en el aprendizaje y el desarrollo de habilidades críticas. No se puede negar que herramientas como ChatGPT tienen el potencial de cambiar significativamente la forma en que accedemos a la información y aprendemos. Sin embargo, es importante considerar varios aspectos:
Complemento vs. Sustituto: Las herramientas de IA deben verse como complementos al aprendizaje y al pensamiento crítico, no como sustitutos. Pueden proporcionar apoyo y recursos adicionales, pero no deben reemplazar el desarrollo de habilidades de razonamiento y análisis crítico.
Educación en Habilidades Digitales: Los estudiantes deben recibir educación sobre cómo utilizar estas tecnologías de manera efectiva y ética, lo que incluye discernir la calidad de la información y evitar la dependencia excesiva de las respuestas generadas por la IA.
Adaptación Curricular: Los currículos educativos pueden necesitar adaptarse para incluir la alfabetización digital y la comprensión de la IA, preparando a los estudiantes para usar estas herramientas de manera responsable y crítica.
Efecto en la Escritura y la Investigación: Hay preocupaciones válidas sobre la posibilidad de que la IA realice tareas que tradicionalmente se consideran esenciales para el aprendizaje, como la redacción de ensayos o la investigación. El desafío es asegurar que estas tareas sigan siendo ejercicios valiosos para desarrollar el pensamiento propio.
Acceso a la Información: ChatGPT y tecnologías similares brindan acceso rápido a una gran cantidad de información, lo cual es beneficioso, pero también puede llevar a una menor profundización en los temas y a una comprensión superficial.
En última instancia, la clave está en cómo se integra la tecnología en la educación. El uso adecuado de ChatGPT puede fomentar la curiosidad, el aprendizaje autodirigido y el acceso a una amplia gama de conocimientos. No obstante, es fundamental que tanto educadores como estudiantes mantengan un enfoque crítico y reflexivo sobre la tecnología, equilibrando la conveniencia y la eficiencia con la necesidad de un pensamiento crítico profundo y habilidades de aprendizaje fundamentales.