El Salvador sufre de un alza imparable en los precios de los alimentos desde el mes de junio, según informes del Centro para la Defensa del Consumidor (CDC).
La situación se ha agravado, según economistas, ante la pobre ejecución financiera del gobierno entre los meses de enero a junio de este año, que en el caso del Ministerio de Agricultura y Ganadería, su ejecución apenas llega al 17 por ciento, pese a que la producción agropecuaria esta disminuyendo y los alimentos rebasan precios históricos.
El precio de la mayoría de los alimentos no disminuyó sus costos en el último mes a pesar de varias amenazas del Gobierno a los empresarios y comerciantes si no bajaban los precios de inmediato. “Ya un mes después del fenómeno, nosotros no notamos bajas en el tema del precio de los alimentos, hay algunos productos que los pueda mencionar, pero en términos generales no notamos bajas”, dijo a periodistas el director ejecutivo del CDC, Danilo Pérez.
Las lluvias de junio en Centroamérica perjudicaron los cultivos de hortalizas a nivel regional, una situación que desencadenó un incremento marcado en el encarecimiento de productos como el tomate, las papas y los chiles, casi todos importados desde Guatemala y Honduras.
El CDC recordó la necesidad de que en El Salvador se legisle para garantizar la seguridad alimentaria del país, una medida que consideran importante debido a que El Salvador es un país importador de alimentos.
«En verduras, hortalizas y frutas no tenemos una planificación por la dependencia de importación que tenemos», dijo Pérez.
El directivo recordó que nueve de cada 10 tomates que se consumen en el mercado salvadoreño son importados y el 93 por ciento de las verduras que se comercializan son adquiridas fuera del país.
Asimismo, señaló que desde 2021 se observa un constante incremento en el costo de los alimentos, mientras aumentan las críticas por el abandono de la agricultura local y la falta de políticas para incentivar la producción nacional.
Agregó el funcionario que estas alzas incidieron el incremento del costo de la canasta básica urbana un 31.5 por ciento pues pasó de costar 199.24 dólares en enero de 2021, a 262.17 para junio de 2024.
Mientras la rural subió de 141.68 a 179.23 durante este período, marcando un alza de un 26.5 por ciento.