Internet podría funcionar con lentitud este viernes. Ocurre que ICANN, la Corporación de Internet para la Asignación de Nombres y Números, se prepara para realizar, por primera vez en su historia, un cambio en la configuración del Sistema de Nombres de Dominio (DNS).
Van a modificar las claves criptográficas que ayudan a proteger el DNS de Internet con el fin de garantizar mayor seguridad y evitar (o minimizar las chances) de que ocurran ataques como el de 2016 que impidió que los usuarios accedieran a las webs más populares del mundo.
De qué se trata
El DNS traduce los nombres de dominio para que la comunicación entre las máquinas funcione. Esto es lo que permite que el usuario ingrese a una página web cuando escribe una dirección URL. El sistema rastrea en los servidores la dirección IP para mostrar la página en cuestión.
Lo que se va a hacer ahora es actualizar las claves criptográficas para otorgar mayor seguridad en este intercambio virtual. Algo que resulta fundamental teniendo en cuenta que los ciberataques son cada vez más frecuentes y sofisticados.
Cómo afectará a los usuarios
Tal como se mencionó, internet tendría dificultad para llegar a los sitios: la web podría estar un poco más lenta o bien algunos sitios podrían figurar como no disponibles por un pequeño período.
A su vez, los mails podrían no llegar, así como demorar un poco más de lo habitual o incluso visualizarse con algunos errores.
De todos modos, la ICANN vaticinó que el impacto debería ser mínimo para los usuarios.