México y Estados Unidos acordaron preparar una iniciativa para crear empleo en Centroamérica, con el fin de frenar el flujo migratorio en la frontera, afirmó este martes en Washington el ministro de Relaciones Exteriores mexicano, Marcelo Ebrard
Las reuniones con el gobierno estadounidense han permitido «ponernos de acuerdo en preparar una iniciativa común de creación de empleos en el corto plazo para Centroamérica y probablemente más allá», declaró Ebrad en una rueda de prensa, insistiendo en que «tiene que ocurrir pronto».
México propuso «una conferencia en Centroamérica para presentar el número de empleos que podemos crear en los próximos meses, ya no tanto los montos de inversión sino cuántos empleos podemos crear (…) unificando esfuerzos» porque «de otra manera no vemos que sea posible lograr una reducción importante en los flujos migratorios», añadió.
El canciller se reunió por la mañana con el secretario de Seguridad Interior (DHS), Alejandro Mayorkas, con quien acordó crear «un grupo de trabajo relativo al tema migratorio en el corto plazo».
Con él habló de los desafíos que implica el levantamiento, el 23 de mayo, de la norma sanitaria que permite expulsar a casi todos los inmigrantes irregulares en la frontera, conocida como Título 42 y aplicados durante la pandemia de Covid-19.
Mayorkas y Ebrard hablaron «sobre el potencial para el desarrollo económico, la creación de empleo y la inversión extranjera en Guatemala, Honduras, El Salvador y otros países de la región para impulsar una solución duradera» a la migración, señaló el DHS en un comunicado.
Mayorkas ha hecho hincapié, añade la nota, «en la necesidad de que los países de la región administren sus respectivas fronteras, brinden ayuda humanitaria a los migrantes que cumplen con los requisitos y repatríen» a los demás.
La rescisión del Título 42 aumentará probablemente el flujo migratorio, un tema polémico con vistas a las elecciones de medio mandato de noviembre en Estados Unidos.
«Se habló de que él piensa que va a haber una presión (migratoria) y por otro lado de la decisión del gobierno de no permitir que se abuse de que desaparezca el Título 42», afirmó Ebrad sobre su reunión con Mayorkas.
El canciller mexicano también conversó con el secretario de Estado estadounidense Antony Blinken, con quien abordó sobre todo la guerra en Ucrania y la Cumbre de las Américas que se celebrará en junio en Los Ángeles.
«La posición de México es que no debe excluirse a nadie, lo reiteramos», afirmó Ebrard, un día después de que el jefe de la diplomacia estadounidense para las Américas, Brian Nichols, descartara invitar a Cuba, Nicaragua y al gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro.
Los dos países comparten sin embargo un enfoque sobre desarrollo, movilidad laboral o inversiones. Para Blinken se trata de dar forma a «una agenda sólida».