Estados Unidos impuso el lunes sanciones a empresas de tecnología financiera y a personas, en su mayoría radicadas en Rusia, acusadas de permitir la evasión de sanciones.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros sancionó a 13 empresas —cinco de las cuales son propiedad de una persona ya sancionada— y a dos individuos que han ayudado a construir u operar servicios basados en cadenas de bloques, o blockchain, para el sector financiero ruso, o han permitido pagos en moneda virtual en dicho sector, “posibilitando así una potencial evasión de sanciones”, según indicó el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
Las sanciones del lunes incluyen a un grupo de empresas de tecnología financiera con sede en Moscú y a una empresa de cambio de divisas virtuales con sede en Rusia y Emiratos Árabes Unidos.
Legisladores y funcionarios del gobierno han expresado su preocupación de que Rusia pueda estar utilizando criptomonedas para evitar los efectos de la avalancha de sanciones impuestas a los bancos, los oligarcas y la industria de la energía en respuesta a la invasión rusa a Ucrania iniciada en febrero de 2022.
Los expertos afirman que la creciente dependencia de Rusia en las criptomonedas para respaldar sus transacciones financieras es inevitable, pero los funcionarios del Tesoro han descartado la noción de que las criptomonedas puedan ser un factor significativo en la evasión de sanciones.
“Rusia está recurriendo cada vez más a mecanismos de pago alternativos para eludir las sanciones de Estados Unidos y seguir financiando su guerra contra Ucrania”, aseveró el subsecretario del Tesoro Brian E. Nelson.
“A medida que el Kremlin trata de aprovechar las entidades en el espacio de la tecnología financiera, el Tesoro continuará exponiendo y afectando a las empresas que tratan de ayudar a las instituciones financieras rusas sancionadas a volver a conectarse con el sistema financiero mundial”.
El presidente ruso Vladimir Putin preside una reunión, celebrada a través de un enlace de vídeo para discutir las consecuencias y las medidas tomadas después del ataque a la sala de conciertos Crocus City Hall, en las afueras de Moscú, Rusia, el 25 de marzo de 2024. Sputnik/Mikhail Metzel/Pool vía REUTERS
Otras sanciones
A finales de febrero, el Reino Unido anunció sanciones contra más de 50 personalidades y empresas rusas en el marco del segundo aniversario de la invasión de Ucrania este fin de semana.
El paquete de sanciones apunta a fabricantes de municiones, misiles y explosivos, empresas de electrónica y comerciantes de diamantes y petróleo.
Con ellas se busca “disminuir” el arsenal de armas del presidente ruso Vladimir Putin, indicó la diplomacia británica.
“Nuestras sanciones privan a Putin de los recursos que necesita desesperadamente para financiar su guerra”, declaró el ministro británico de Exteriores, David Cameron, citado en un comunicado.
“Seguiremos apoyando a Ucrania en su lucha por la democracia el tiempo que sea necesario”, añadió.
En otro orden, Reino Unido vetó y congeló los activos en este país a los responsables de la prisión del Ártico donde el opositor ruso Alexei Navalny fue “detenido y asesinado”, según la lista de sanciones anunciadas el miércoles por el propio Cameron.
El político ruso, considerado enemigo número uno del Kremlin, falleció repentinamente el pasado día 16 de febrero en la cárcel ártica “Lobo Polar” y su esposa y su equipo han culpado al presidente ruso, Vladimir Putin, de ordenar su asesinato.
En un comunicado, el Foreign Office reveló que los seis individuos sancionados incluyen a Vadim Konstantinovich Kalinin, el hombre que supervisó la “brutal” prisión en la que Navalny “era retenido en confinamiento solitario hasta dos semanas cada vez”.