Estados Unidos lanzó una nueva ola de ataques sobre Siria este viernes por la noche, en represalia por la muerte de sus militares tras un bombardeo en Jordania, informaron la agencia AP y las cadenas de TV ABC y Fox News. También se registraron ofensivas en el oeste de Irak, cerca de la frontera el anterior país.
Según confirmó Washington, la operación “exitosa” que duró unos 30 minutos se realizó tanto con aviones tripulados como con drones e implicó cuatro rondas de incursiones en más de 85 sitios -muchos de ellos en la provincia oriental de Deir Ezzor, la zona de Al-Qaim, la ciudad de Al Mayadín y el distrito de Al Bukamal- en los que operaban militantes pro iraníes, como cuarteles generales de mando, control e Inteligencia, almacenes de municiones y otras instalaciones.
“Los ataques aéreos emplearon más de 125 municiones de precisión” sobre objetivos pertenecientes a combatientes ligados a las Fuerzas Al Quds, “que facilitaron los ataques contra las fuerzas estadounidenses y de la coalición”, indicó en un comunicado el Mando Central de Estados Unidos mientras el presidente Joe Biden advirtió que estos actos “continuarán”.
“Nuestra respuesta comenzó hoy y continuará cuando y donde lo decidamos. Estados Unidos no busca conflicto en Medio Oriente ni en ningún otro lugar del mundo pero para todos los que busquen hacernos daño: si hieren a un estadounidense, responderemos”, sostuvo el mandatario momentos después de confirmarse la ofensiva.
Asimismo, un primer informe del Observatorio Sirio de Derechos Humanos dio cuenta de al menos 18 miembros de estas milicias abatidos -cinco de ellos en Deir Ezzor- y otro tanto de heridos pero la información no ha sido confirmada por las partes.
Los ataques se realizaron el mismo día que llegaron a la base militar de la Fuerza Aérea en Dover, Delaware, los restos de los tres oficiales abatidos días atrás en un ataque con drones enemigos. William Rivers, Breonna Moffett y Kennedy Sanders fueron los primeros soldados de Washington muertos en un ataque en Oriente Próximo desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamas, el pasado octubre.
Es por ello que, además de rendirles homenaje este viernes, la administración de Bidenprometió una respuesta decisiva a esta ola de violencia, que ya ha dejado a decenas de oficiales heridos. Inclusive, si bien esta semana funcionarios estadounidenses habían evitado dar detalles de la represalia, el secretario de Defensa, Lloyd Austin, había adelantado la víspera que se trataría de una respuesta “múltiple” y “escalonada”.
“Tenemos la capacidad de responder varias veces, dependiendo de cuál sea la situación”, declaró el jefe del Pentágono mientras la cadena CBS News sumó que los ataques se prolongarían durante varios días en ambos países.
Este domingo, el Mando Central de Estados Unidos informó que tres de sus militares en el norte de Jordania habían sido abatidos y otros 34 heridos durante un ataque unidireccional con drones, que impactó en la Torre 22, cerca de la frontera con Siria. La ofensiva fue reivindicada por la Resistencia Islámica en Irak, que suele realizar este tipo de maniobras contra bases de Washington en la región.
No obstante, Biden apuntó contra el régimen de Teherán por estar detrás de este episodio ya que es quien respalda a estos grupos rebeldes y les facilita los medios para sus operaciones.
“Lo considero responsable en el sentido de que está suministrando armas a las personas que lo hicieron”, apuntó el mandatario a la par que insistió en que, si bien ordenará maniobras firmes contra enemigo como consecuencia, no desea ampliar el conflicto en la región. Por su parte, Irán negó haber estado detrás de este atentado y amenazó con “responder decisivamente” a cualquier ofensiva estadounidense contra la República Islámica.
Desde el pasado 18 de octubre, apenas días después de iniciada la guerra en Gaza, la coalición de milicias pro iraníes en la región -entre ellas Hezbollah, la Yihad Islámica y los rebeldes hutíes de Yemen- llevan lanzados cerca de 166 ataques contra instalaciones militares estadounidenses, entre ellos 67 en Irak, 98 en Siria y uno en Jordania, que dejaron a decenas de oficiales heridos. En ellos se utilizaron todo tipo de armas, desde drones, cohetes y hasta misiles balísticos de corto alcance.
Con información de AFP, AP y EFE