El Salvador alcanza ya los 505 casos confirmados de dengue en lo que va del año, lo que se suma a 7 menores que han muerto a causa de esta enfermedad, informó el lunes el titular del Ministerio de Salud (Minsal), Francisco Alabí.
En declaraciones a periodistas, Alabí señaló que «los menores de edad son el grupo de la población que más propenso está a la enfermedad por no tener desarrolladas sus defensas».
Según el funcionario, el Gobierno «realiza todas las acciones necesarias para salvaguardar la vida de la población que se está viendo afectada por la enfermedad».
Alabí avisó el domingo la muerte del séptimo menor por causa del dengue y reiteró el llamado a los padres de familia «a estar atentos ante cualquier signo o síntoma de alarma, para consultar de inmediato y evitar la automedicación».
La dirección general de Protección Civil decretó el pasado 3 de julio una alerta roja para todo el país por dengue y se intensificaron las jornadas de fumigación y entrega de abate, sin embargo, la enfermedad sigue cobrando vidas.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), no hay una medicina especializada para tratar el dengue, que se transmite por la picadura de un mosquito y cuya infección puede ser asintomática o evidenciarse con síntomas que van desde una fiebre moderada a una fiebre alta e incapacitante, dolores de cabeza, dolores musculares y sarpullidos.
En los peores casos, la enfermedad puede convertirse en un padecimiento grave, que produce la dificultad para respirar, sangrado grave y complicaciones de los órganos internos.
