China rechazó las declaraciones del presidente electo, Nayib Bukele, acerca que la nación asiática mantiene una política intervencionista en los asuntos de otros países, y lo exhortó a mantener las relaciones bilaterales.
Bukele, que se encuentra de gira por México y Estados Unidos tras su elección en febrero, ha dicho en reiteradas ocasiones que se encuentra evaluando la conveniencia de mantener las relaciones con China Comunista, siete meses después de que el actual gobierno del FMLN decidió establecerlas.
El izquierdista Salvador Sánchez Cerén decidió en agosto romper relaciones diplomáticas con Taiwán y establecerlas con China, una decisión que fue cuestionada por el gobierno de Donald Trump.
Bukele, electo por amplia mayoría en los comicios del 3 de febrero y quien asume el poder el 1 de junio, dijo el miércoles durante una intervención en la capital estadounidense que China «no son una democracia, pero se meten en tu democracia» y que si el gigante asiático desea mantener las relaciones con la nación centroamericana debe «respetar».
«China nunca ha hecho nada para amenazar e intimidar a otros países (…) China nunca busca intervenciones en asuntos internos de otros países, sino siempre abre y desarrolla relaciones diplomáticas con todos los países, tal como el caso de El Salvador», respondió la embajada china en El Salvador a través de un comunicado.
La nación asiática, que donó 150 millones de dólares a El Salvador, exhortó al nuevo mandatario a continuar con las relaciones.
«Estamos convencidos de que el presidente electo Nayib Bukele, con su sabiduría y coraje de un gran líder joven, tomará una decisión acertada, en línea con la justicia internacional y la tendencia de esta era histórica», señaló la sede diplomática.
Por su parte, el actual gobierno salvadoreño, que ha defendido su decisión de establecer relaciones con el gigante asiático, sostiene que Bukele está recibiendo órdenes de funcionarios estadounidenses para terminar con las relaciones bilaterales.