El Congreso de la República amplió el jueves la vigencia del estado de emergencia por 15 días más entre reclamos de la oposición de mayor transparencia sobre los fondos utilizados para atender la crisis sanitaria generada por el COVID-19.
La medida, solicitada por el Gobierno de Nayib Bukele y que concluirá el 16 de mayo junto a la cuarentena, fue aprobada con 82 votos de los 84 diputados en la sesión plenaria semanal de este jueves y no implica la suspensión de las garantías constitucionales.
La aprobación se dio después de más de una hora de discusiones en el pleno por la solicitud are la mayoría de diputados de exigir al Gobierno informes detallados de los fondos utilizados para atender la pandemia.
«Estamos siendo única y exclusivamente tramitadores de iniciativas del Gobierno», sostuvo el diputado opositor de la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) Mauricio Vargas, quien llamó a no dejar el «control político que este Congreso tiene».
El Ejecutivo solicitó a los diputados la aprobación de 1.000 millones de dólares para un plan de impulso a la economía, fondos que se sumarían a los 2.000 millones que el Legislativo autorizó para atender la pandemia.
Guillermo Gallegos, de la oficialista Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), urgió la aprobación en medio de las discusiones y pidió que se dejarán de lado los otros temas para discutirlos posteriormente.
Los legisladores también aprobaron una extensión de 30 días para la declaración del Impuesto Sobre la Renta y de una contribución especial para la seguridad.
Tras la aprobación de la prorroga del estado de emergencia, el presidente del Congreso, Mario Ponce, cerró la sesión e inició inmediatamente otra en la que se discutirán los vetos de Bukele a una iniciativa del Congreso para facilitar el retorno de unos 4.500 salvadoreños en el exterior y otra que buscaba proteger los derechos humanos durante la cuarentena.
