El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, aterrizó este jueves en Tel Aviv y se reunió con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en el marco de una gira por Medio Oriente para mostrar la solidaridad de Washington con Israel tras los ataques terroristas de Hamas y trabajar para evitar que el conflicto se agrave.
Blinken tratará también de ayudar a conseguir la liberación de los rehenes secuestrados por Hamas -algunos de los cuales son estadounidenses- y de avanzar en las conversaciones con israelíes y egipcios para facilitar un paso seguro de los civiles de Gaza fuera del enclave antes de una posible invasión terrestre israelí.
Después de Israel, Blinken se dirigirá a Jordania, donde se reunirá con el rey Abdullah y con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas.
En sus declaraciones del miércoles, Blinken afirmó que su país está “resuelto” a garantizar que Israel tiene lo que necesita para defenderse y proporcionar seguridad a su pueblo.
El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken EFE/EPA/JIM LO SCALZO/Archivo
Sobre los contactos para abrir un corredor seguro para la salida de los civiles de Gaza a Egipto, Blinken admitió el miércoles que esos contactos se están llevando a cabo: “Estamos hablando sobre eso y vamos a hablar sobre eso con Israel. Estamos hablando con Egipto sobre eso”, señaló.
Subrayó que, pese a que es complicado, EEUU quiere asegurarse, al igual que Israel, que “ningún civil es dañado”.
Aun así, defendió que “Israel tiene que adoptar medidas para defenderse, tiene que garantizar que aniquila cualquier amenaza en marcha”.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, se reunió en Tel Aviv con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu
Ascienden ya a 1.300 el número de muertos en Israel por el ataque de la organización terrorista Hamas del sábado pasado, de acuerdo a fuentes médicas citadas por la prensa israelí.
Además, hay un total de 3.268 heridos hospitalizados en Israel, de los que 28 están en estado crítico, 348 graves y 581 moderados, apuntan los últimos datos del Ministerio de Sanidad israelí.
Con información de Reuters