La pobre gestión de las alcaldías, en su mayoria bajo el gobierno de Nuevas Ideas (NI) y la economía son los puntos más débiles percibidos por la población salvadoreña en la presente gestión gubernamental, según una pesquisa del Centro de Estudios Ciudadanos (CEC) de la Universidad Francisco Gavidia (UFG).
Óscar Picardo Joao, director del CEC, presentó en la Telecorporación Salvadoreña (TCS), el muestreo que presenta que el principal reto del presidente Nayib Bukele es la economía, que tiene la peor calificación entre la población y en una tabla del 0 al 10 recibe un 6.31, solo por encima de los 5.49 puntos que la población dá a las alcaldías.
El muestreo midió también la percepción de la población sobre el presidente Nayib Bukele, quien recibió un 8.43 y que ni baja de siete ni sube a nueve durante los últimos cinco años, lo que si había logrado al inicio de su primera gestión.
En la consulta, en la que participaron mil 224 personas, se encontró que la seguridad es el aspecto mejor calificado en la percepción de la población, mientras el régimen de excepción es apoyado por un 76.4 por ciento de la población, que a su véz desconoce en qué consiste dicho régimen.
Además, la mayoría de la población cree que su situación económica familiar es regular (52.5), mala (17) o muy mala (3.4 por ciento), un cuarto de la población sostiene que es buena (23.4) o muy buena (3.6), lo que contrasta con los reportes en redes sociales que se quejan diqariamente de lo insuficiente de los ingresos promedio de los salvadoreños para siquiera cubrir la canasta básica ampliada (CBA).
En cuanto a los ingresos y el gasto, una parte de la población plantea no les alcanza el dinero (31.4 por ciento), les resulta muy ajustado aseveró el 45.7 y apenas un 22.9 por ciento opinó que su presupuesto familiar le es suficiente.
Picardo explicó además que los salvadoreños están divididos en partes iguales entre optimistas y los escépticos, y una minoría de pesimistas. Cuatro de cada 10 cree que la situación general del país mejoró, cuatro cree que la situación sigue igual y dos sostienen que ha empeorado.
En cuanto a la percepción del país, un 58 por ciento dijo ser optimista, un 31 lo ve con incertidumbre y un 7.9 con pesimismo, siendo esto una muestra de la polarización que existe en el país.