«Goliat avanzó de nuevo y David corrió a su encuentro, y sacando una piedra de la alforja la lanzó con la honda y golpeó al gigante en la frente. La piedra se le clavó en la frente al gigante y cayó de cara a tierra. De esa manera David venció al gigante filisteo.»
“Yo soy la David contra un Goliat…. vamos a ganar porque ustedes están con los buenos y la buena soy yo”. Con esa frase cerró su campaña Milagro Navas, quien arrasó en las elecciones para alcaldes el pasado domingo 3 de marzo y aseguró su decimotercer período.
La representante de la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) es la única política que a partir del 1 de mayo encabezaría un gobierno municipal sin pertenecer al partido del presidente Nayib Bukele o a las toldas políticas aliadas.
«Doña Mila» como le dicen los residentes de Antiguo Cuscatlán luego de ser gobernados por ella por por 36 años, estará al frente de la Libertad Este, una nueva entidad que incluye no solo Antiguo Cuscatlán, sino también Nuevo Cuscatlán, cuna de la carrera política y lugar de residencia de Nayib Bukele, San José Villanueva, Huizúcar y Zaragoza.
En esta ocasión, David no liquidó a Goliath de una «pedrada», sino con un abrumante contra su contrincante en las urnas, Michelle Sol, ministra de Vivienda, esposa del presidente de la Asamblea Legislativa Ernestro Castro y candidata al cargo por Nuevas Ideas, quien tuvo el respaldo de la monstruosa estructura estatal para su campaña.
Sol era, además, la favorita según todas las encuestas preelectorales, las mismas que a Navas le otorgaban apenas alrededor del 26% de la intención de voto, por lo que Doña Mila también derroto a las encuestas, pagadas o no por el Ejecutivo o la estructura partidaria oficialista.
Navas comentó días atrás a periodistas que “Pero este Goliat no es la señora candidata (Michelle Sol), este Goliat es el aparataje que ellos van a tirar de la Asamblea Legislativa (…). Tienen todo el dinero del mundo para hacer muchas cosas”.
La Libertad Este nació como tal cuando en junio del año pasado la Asamblea Legislativa aprobó la Ley Especial para la Reestructuración Territorial Municipal, que redujo los municipios de 262 a 44, y agrupa también a San José Villanueva, administrada hasta ahora por el PCN, y Huizúcar y Zaragoza, gobernadas por Nuevas Ideas.
Tres décadas de alcaldesa
“La experiencia garantiza el éxito”, era el lema de campaña de Navas, y de eso ella tiene mucho.
El Salvador aún estaba sumergido en la guerra civil cuando en 1988 fue electa por primera vez alcaldesa de la ciudad que la vio nacer, Antiguo Cuscatlán, de la mano del entonces opositor Arena, partido al que ha representado siempre.
Graduada en Relaciones Públicas y Publicidad por la Universidad Nueva San Salvador, había trabajado en la banca y en una agencia de publicidad antes de sumergirse en la política.
“Recuerdo que yo ni hablar podía en público, y el mayor Roberto d’Aubuisson (el fundador de ARENA) me hizo un mi papel y lo perdí. Me regañó. Pero después me entrenaron (…)”, contó sobre sus inicios en el programa local de radio La Tribu el 26 de febrero, durante la campaña.
El propio d’Aubuisson fue el mentor político y amigo de Navas, que a diferencia de muchos políticos, funcionarios del pasado y dirigentes de la tolda tricolor, lleva más de treinta años trabajando por la población que sirve, ayuda y protege.
Como política hábil, se ha ido adaptando a los tiempos y se ha distanciado de la bandera tricolor cuando lo ha considerado necesario para conservar el poder municipal, pero nunca abandonando su ideología republicana.
En un contexto en el que ARENA logró apenas el 5,99% de los votos en las elecciones presidenciales y sólo dos de los 60 escaños de la Asamblea en las legislativas del 4 de febrero, Navas mantuvo un color de identidad propio, el rosado, que fue bien recibido por la población y evitó usar el tricolor característico de ARENA (rojo, azul y blanco) para evadir los ataques que Nuevas Ideas y el oficialismo le lanzaban por sus orígenes políticos desde las hordas de troles en redes sociales y los medios de propaganda de gobierno, como el Diario El Salvador, Canal 10, La Huella y cientos de activistas, entre ellos reporteros de poca monta que se vendieron por pocos dólares durante la campaña para ser parte del ejército de enemigos de la democracia.
Navas, que demostró ser más inteligente que Goliath, también eludió el tono de confrontación durante la noche de su triunfo electoral.
Mientras Nayib Bukele utilizaba las redes sociales para atacar y estigmatizar a Milagro Navas como un alcalde solitario por la oposición, Doña Mila se mantuvo en la línea de los mensajes de apoyo a la institución que preside que le ha lanzado al menos desde 2020 y le extendió a Bukele la mano desde la tarima colocada en el parque central de Antiguo Cuscatlán.
“Vamos a cambiar la historia, porque si queremos llevar proyectos, tenemos que trabajar con el gobierno central. Una sola golondrina no hace verano”, proclamó frente a una multitud de simpatizantes que la aplaudía.
“Estoy segura de que los proyectos que le pida (a Bukele) nos los va a dar, porque no son mí, son para ustedes”, añadió antes de colocarse una corona similar a la de las misses facilitada por sus seguidores.
“Cuente con nosotros Sr. presidente”, escribió asimismo en X, antes Twitter. “No son 43, seremos 44 alcaldías que buscarán el bienestar de todos los salvadoreños”.
Si Bukele manipula la incipiente Dirección de Obras Municipales (DOM), el Ministerio de Obras Públicas (MOP), el Vice ministerio de Transporte (VMT), el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Municipales u otra entidad del Ejecutivo para dañar al mega municipio gobernado por ARENA y su alcalde Milagro Navas, sería muy evidente y tarde o temprano se les devolvería su estrategia contra ellos mismos.