El Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), la nueva cárcel del Estado salvadoreño, con capacidad para al menos 40.000 pandilleros, es «la prisión más segura de América Latina», según el Ejecutivo del presidente Nayib Bukele, además, su gobierno asegura que los detenidos «no tienen ningún privilegio».
Por el momento son 4.000 los pandilleros los se encuentran ya en las instalaciones, ubicadas en el central municipio de Tecoluca, a unos 75 kilómetros de San Salvador.
«Los 4 mil pandilleros recluidos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), en Tecoluca, San Vicente, han comprobado en carne propia que las medidas de seguridad en sus instalaciones son inviolables, sin ningún tipo de privilegios y que jamás volverán a las calles a atentar contra la vida de los salvadoreños», publicó el Gobierno el domingo en redes sociales.
Bukele inauguró el Cecot a finales de enero y el ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, dijo al mandatario que esta «se constituiría en la cárcel más grande de toda América» y que «sería imposible que salga un reo».
La construcción de la moderna prisión se dio entre críticas de la oposición que ha señalado falta de transparencia, principalmente por la aprobación en la Asamblea Legislativa, dominada por el oficialismo, de una ley que permitía saltarse los controles acostumbrados en las obras estatales.
Amnistía Internacional (AI) expresó su preocupación por la nueva cárcel y su «profunda preocupación», dado que «la construcción de esta nueva prisión podría suponer la continuidad y el escalamiento de estos abusos».
No obstante, ni las criticas por la nueva prisión ni la implementación de un régimen de excepción, que suspenden garantías constitucionales, parecer deteriorar la imagen del presidente Bukele.
Al contrario, el 91 % de los salvadoreños aprueba el trabajo que ha realizado Bukele, luego de tres años y nueve meses en el cargo, según una encuesta de LPG Datos publicada recientemente.