En Mai Mahiu, un pequeño pueblo rural en el suroeste de Kenia, ubicado a 50 kilómetros de Nairobi, llevaban semanas de lluvias intensas, inundaciones y temblores.
Pero el 18 de marzo algo distinto sucedió: la tierra comenzó a abrirse.
«Mi esposa empezó a gritar a los vecinos pidiéndoles que vinieran a ayudarnos para sacar nuestras pertenencias», contó el keniata Eliud Njoroge este jueves a la agencia Reuters.
Desde entonces, la grieta en el piso de cemento de su casa no ha hecho más que extenderse, convirtiéndose en una de las tantas familias de la zona evacuadas.
«Las grietas corren casi en línea recta, así que puedes proyectarlas. Si ves una grieta dirigiéndose hacia ti, córrete de su camino», dijo a Reuters el geólogo keniata David Adede.
La enorme fisura, que en este momento tiene kilómetros de largo y llega a un par de decenas de metros de ancho, está vinculada a la falla tectónica conocida como Valle del Rift de África Oriental.
Según los geólogos, esta grieta es una muestra de que, en decenas de millones de años, este rift podría separar a África en dos.
África sin el Cuerno
Así como hace 138 millones de años América del Sur y África se separaron en dos continentes distintos, los geólogos estiman que llegará un momento en que el Cuerno de África se desprenda de dicho continente.
El Valle del Rift de África Oriental se extiende por más de 3.000 kilómetros, «desde el Golfo de Adén en el norte hasta Zimbabue en el sur, dividiendo la placa africana en dos partes iguales: la somalí y la nubia», afirma la geóloga Lucía Pérez Díaz en la revista científica The Conversation.
La científica del Grupo de Investigación de Fallas Dinámicas del colegio Royal Holloway sostiene que «la actividad a lo largo de la rama oriental del Valle del Rift, que corre a lo largo de Etiopía, Kenia y Tanzania, se hizo evidente cuando la gran fisura apareció repentinamente en el suroeste de Kenia».
Para Pérez Díaz, este rift es único en el planeta porque permite observar las diferentes etapas de la fisuración en vivo.
La fractura más interesante, escribe, comenzó en la región de Afar, al norte de Etiopía, hace unos 30 millones de años.
Desde entonces se está propagando hacia el sur, rumbo a Zimbabue, a un promedio de entre 2,5 y 5 centímetros por año.
Actualmente en Afar la capa exterior sólida de la Tierra, llamada litósfera, se ha reducido hasta el punto de una ruptura casi completa.
Cuando se quiebre, detalla Pérez Díaz, un nuevo océano comenzará a formarse y, «en un período de decenas de millones de años, el lecho marino avanzará a lo largo de toda la grieta».
«El océano se inundará y, como resultado, el continente africano se hará más pequeño y habrá una gran isla en el Océano Índico compuesta por partes de Etiopía y Somalia, incluido el Cuerno de África«, afirma.
La geóloga incluso comparte este tuit de un usuario que dice vivir en el Valle del Rift de África Oriental, que muestra una imagen del continente africano dividido y bromea: «Así que esto ocurrirá en los próximos 50 millones de años. No puedo esperar».