Varios contingentes de taxistas se manifestaron este viernes en San Salvador para exigir al gobierno frenar el servicio de transporte Uber, al considerar que su operación en el país es ilegal.
«Exigimos que cese de operar Uber en este país, no están autorizados a brindar servicio de transporte y eso afecta a quienes tenemos que pagar año con año para operar como taxistas», dijo a periodistas Miguel Ángel Martínez, uno de los taxistas en protesta.
Poco más de un centenar de taxistas se concentraron en San Salvador, a donde llevaron pancartas con la leyenda «fuera Uber», la misma que también habían escrito en los parabrisas de sus taxis amarillos.
Tras dar a conocer sus exigencias, los taxistas se montaron a sus carros y recorrieron en caravana calles de la capital, haciendo sonar las bocinas y provocando un enorme congestionamiento vehicular.
Uber comenzó a funcionar este año en San Salvador y ha extendido el servicio a otras ciudades de la periferia capitalina.
Según los gremios de taxistas, al menos unos 7.000 choferes son afectados por la operación de Uber, que opera sin aval del viceministerio de Transporte (VMT).
«Uber, es cierto, no cuenta con autorización de operación, y se ha pedido por eso a quienes trabajan con Uber abstenerse a hacerlo pues de lo contrario las autoridades de la policía procederán a decomisar los vehículos», señaló a periodistas un portavoz del VMT.
Taxistas en varias ciudades de la región y el mundo han armado una resistencia hacia aplicaciones como Uber, a la que acusan de operar de manera ilegal y mermar sus ingresos.