Guatemala nuevamente se encuentra en alerta debido a la llegada de las variantes del COVID-19. De acuerdo al Ministerio de Salud del país, en los últimos días se ha logrado detectar la transmisión de cinco mutaciones distintas del virus SARS-CoV-2 entre los pacientes que han enfermado de este padecimiento.
Las variantes que han sido halladas son Alpha (Reino Unido), Gamma (Brasil), Beta (Sudáfrica), Iota (Estados Unidos) y Epsilon (Estados Unidos). En total, han sido confirmados 21 casos ligados a estas variantes, 13 de ellos conectados con la mutación reportada por primera ocasión en territorio británico.
Ante la aparición de estas variantes en el país, el gobierno de Guatemala alertó a sus ciudadanos a no bajar la guardia y mantener las medidas preventivas. “La nueva cepa COVID ya está aquí. Lava tus manos y usa alcohol, usa mascarilla siempre, respeta la distancia y vacúnate cuando sea tu turno”, decía un mensaje de texto enviado a la población.
A consecuencia del incremento de contagios en los últimos días, el pasado 1 de julio las autoridades emitieron una alerta sanitaria por el aumento de las hospitalizaciones y muertes relacionadas con el coronavirus.
Aunado a esto, las autoridades sanitarias guatemaltecas advirtieron por la aparición de dos casos de mucormicosis—conocida como la enfermedad del hongo negro—que ha sido ligado con los pacientes portadores del virus SARS-CoV-2.
Los dos casos se presentaron en mujeres a mediados de junio, sin embargo, los resultados de sus pruebas fueron confirmados hace algunos días. La enfermedad del hongo negro se considera oportunista y afecta a las personas con un sistema inmunológico deficiente o con enfermedades crónicas como la diabetes.