El Congreso de la República de Guatemala rechazó el estado de Calamidad en la red vial promulgado por el Ejecutivo con intención de dejar sin efecto los procedimientos de la Ley de Compras y Contrataciones del Estado.
La iniciativa enviada por el Organismo Ejecutivo al Parlamento sólo logró el respaldo de 47 diputados, mientras que otros 67 la rechazaron y 44 legisladores no asistieron a la sesión.
Por su parte, el presidente guatemalteco, Jimmy Morales, anunció que se presentarán dos iniciativas de ley al Congreso, una para reformar la ley de Compras del Estado y otra para liquidar a las empresas constructoras con problema legales.
Con el estado de Calamidad, el Ejecutivo buscaba trabajar en las carreteras CA2 Occidente –ruta al Pacífico– y CA Oriente –ruta al Atlántico–, que estaban a cargo de las constructoras brasileña Odebrecht y la guatemalteca Sigma.
Luego de publicar el decreto, el mandatario Morales se había pronunciado contra diputados de la oposición, a quienes señaló que cuando gobernaron no solucionaron el problema de las carreteras en mal estado.