El Salvador cumplió el lunes 31 años de la firma de los Acuerdos de Paz de 1992, que pusieron fin a 12 años de guerra civil (1980-1992), sin actos oficiales y con advertencias por parte de la exguerrilla.
El Ejecutivo de Nayib Bukele no conmemoró los acuerdos firmados en Chapultepec, México, entre el Gobierno de Alfredo Cristiani, quien había sido elegido presidente por la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) y la entonces guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), ahora partido de oposición.
Bukele ha calificado estos acuerdos, que fueron acompañados por la ONU, de «farsa».
Advertencias de la Exguerrilla al Gobierno de Nayib Bukele
En cambio, el secretario general del FMLN y exvicepresidente, Óscar Ortiz, declaró en un acto ante un centenar de sus correligionarios que «no hay evento más importante» en la historia reciente de El Salvador que la firma de la paz.
Yendo más allá, Ortíz advirtió al gobierno de Nayib Bukele que «señales reiteradas nos dicen que podemos volver a una noche oscura, que puede ser larga».
Ortíz señaló que «No creo que en el país tengamos que volver a un estado de persecución, de represión, de militarización, donde nuevamente se quiera imponer la censura y callar voces».
Por su parte, Karina Sosa, diputada del Parlamento Centroamericano por el FMLN y excandidata a la Vicepresidencia, quien goza de fuero constitucional, dijo que se quiere «borrar de tajo ese recuerdo» de los Acuerdos de Paz.
La también secretaria general adjunta del FMLN aseveró que “muchas cosas” que dieron lugar al conflicto armado se han hecho presentes en el país otra vez.
Según Sosa, entre los factores que propiciaron la guerra y que han vuelto están: la persecución política, la no garantía y cumplimiento de derechos humanos, el alto costo de la vida, la desesperación en la población, el amedrentamiento y el abuso de autoridad.
Advirtió que «están queriendo callar voces» de la oposición y que ese es «uno de los más claros ejemplos de los retrocesos» que vive El Salvador. Además, calificó de “peligroso” que el recuerdo de los Acuerdos de Paz y las causas del conflicto se quieran olvidar “porque no es posible –dijo– que nos hagan retroceder más de lo que nos han hecho retroceder”.
El conflicto armado
La guerra civil salvadoreña fue el conflicto bélico interno en el que se enfrentaron las Fuerzas Armadas de El Salvador cumpliendo su rol constitucional de la defensa de la soberanía del Estado y las fuerzas insurgentes del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) que ejecutaron una agresión comunista en el marco de la Guerra Fría.
El conflicto nunca fue declarado en forma oficial, pero se considera usualmente que se desarrolló entre el 10 de enero de 1981 y el 16 de enero de 1992,
El número de víctimas de esta confrontación armada ha sido calculado en más de 70 000 muertos y 8 000 desaparecidos. El conflicto concluyó, luego de un proceso de diálogo entre las partes, con la firma de un acuerdo de paz, que permitió la desmovilización de las fuerzas guerrilleras y su incorporación a la vida política del país.