Las autoridades de Estados Unidos y México han deportado a más de 102,000 migrantes de El Salvador, Guatemala y Honduras entre enero y agosto de 2024, un 4% más que en 2023, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Los datos, que corresponden a entidades gubernamentales de los tres países, dan cuenta de que las deportaciones de Estados Unidos llegaron a 82,110, de México a 20,238 y 341 de otros países, para totalizar 102,689.
Esta cifra es superior en 4,076 reportes en comparación con las 98,613 deportaciones del mismo lapso en 2023, un incremento del 4,1%.
De este total, 13,144 deportaciones corresponden a niñez y adolescencia, de los que 8,339 fueron desde Estados Unidos, 4,612 de México y 193 de otros países. Esta cifra presenta una disminución de 1,280 casos, un 8,9% menos que 2023.
En total por país, las repatriaciones a la zona conocida como Triángulo Norte de Centroamérica llegaron a 10,326 en El Salvador, 57,944 casos en Guatemala y 34,419 para Honduras.
Con dichas cifras, El Salvador computó un 35,8% de incremento; Guatemala un 12,8% y Honduras una reducción de 13,2%, según las cifras recabadas por la OIM.
Los datos presentados por la OIM son de las gubernamentales Dirección General de Migración y Extranjería de El Salvador; la Instituto Guatemalteco de Migración y Secretaría de Bienestar Social de Guatemala; y el Observatorio Consular y Migratorio de Honduras.
Cada año, más de 500,000 personas procedentes de estos tres países intentan emigrar de manera irregular a Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida, incluyendo miles de menores de edad.