«Estados Unidos no se quedará quieto mientras Venezuela se desmorona», afirmó el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Este lunes, a través de un comunicado, el mandatario anticipó que su país impondrá sanciones económicas «rápidas y firmes» al país latinoamericano si el gobierno de Nicolás Maduro lleva adelante la Asamblea Constituyente que promueve.
«Estados Unidos una vez más exige elecciones libres y justas, y apoya al pueblo de Venezuela en su deseo de que su país vuelva a ser una democracia plena y próspera», señaló Trump.
El presidente estadounidense, además, valoró la consulta que llevó adelante la oposición venezolana el domingo.
«El pueblo venezolano nuevamente dejó en claro que está del lado de la democracia, la libertad y el estado de derecho. Sin embargo, sus acciones importantes y valerosas continúan siendo ignoradas por un pésimo líder que sueña en convertirse en un dictador».
El fin de semana, 7,6 millones de personas participaron en la denominada consulta popular, según cifras de la oposición.
Los líderes opositores anunciaron que a partir de la consulta comienza una nueva etapa, bautizada como la «hora cero», en su búsqueda por frenar la Constituyente y llamar a elecciones presidenciales.
Maduro
Antes de la declaración de Trump, el presidente Nicolás Maduro confirmó la realización de la Constituyente, cuya votación para elegir representantes está fijada para el 30 de julio.
La semana pasada Maduro ya se refirió a las amenazas de sanciones que llegaron desde Washington.
«El imperialismo anda amenazándonos que si se da laAsamblea Nacional Constituyente ellos van a bloquear a Venezuela.¿Bloquear a Venezuela? A Venezuela no la bloquea nadie, compadre», dijo Maduro.
El mandatario venezolano agregó que el suyo «es un país libre y soberano» y que «no se deja amenazar mi intimidar por ningún imperio de este mundo».
En junio, el secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson, explicó que el gobierno de Trump ya trabaja en una «lista muy robusta» de individuos de Venezuela para ampliar sus sanciones por violaciones de derechos humanos en ese país.
Según informes de prensa, Estados Unidos considera ampliar estas sanciones al sector energético de Venezuela, incluida la petroleraestatal PDVSA, un extremo que la Casa Blanca no ha confirmado.
La actual crisis política de Venezuela lleva más de tres meses de duración en los que murieron más de 90 personas.