En las últimas semanas, la ola de calor ha afectado a gran parte de Centroamérica y Máxico, ocasionando altas temperaturas y hasta muerte de animales en el sur de la República Mexicana y norte de Guatemala.
Gracias a este incremento de temperatura, recientemente se informó que Centroamérica y México serán testigos del fenómeno conocido como Domo de Calor, el cual según lo reportado traerá temperaturas superiores a los 45° Celsius. Jeff Berardelli, experto en Clima de la WFLA-TV en Tampa Bay, Florida, informó sobre el histórico domo de calor que afecta a México y Centroamérica.
El meteorólogo indicó que, en nuestro país, las temperaturas podrían llegar hasta los 51 grados Celsius en algunas áreas.
Se espera que el termómetro alcance valores aún más altos en Petén, Guatemala, San Miguel, en El Salvador; y en México, en la localidad de Becanchen, Yucatán, se prevén hasta 44 grados Celsius, mientras que en Las Gallinas, Michoacán, las temperaturas podrían llegar hasta los 51 grados Celsius.
Berardelli ha especificado que el domo de calor podría permanecer estacionado en el área durante diez días y que además podría intensificarse para el fin de semana. Este domo de calor permanece en Centroamérica y México desde el pasado lunes 20 de mayo y así permanecerá hasta el miércoles 29 de mayo 2024, por lo menos.
¿Qué es un domo de calor?
Según National Geographic, un «domo de calor», también conocido como cúpula de calor o heat dome, es una masa de aire caliente que se forma en la atmósfera, especialmente durante épocas de altas temperaturas y condiciones climáticas estables.
Este fenómeno ocurre cuando una capa de aire caliente se acumula cerca de la superficie terrestre y queda atrapada por una capa de aire más fresco situada encima. Como consecuencia, el calor se concentra y se intensifica, generando condiciones climáticas extremadamente calurosas y sofocantes.
Los domos de calor pueden perdurar durante varios días o incluso semanas, desencadenando olas de calor que representan un peligro para la salud humana, especialmente para grupos vulnerables como los niños pequeños, las personas mayores y aquellos con afecciones de salud preexistentes.
¿Que nos espera?
Según explica Andrew Kruczkiewicz, investigador principal de la Facultad Meteorológica de la Universidad de Columbia, la región está pasando de una fase de El Niño, en la que suele reducirse la actividad de los ciclones tropicales en el Golfo de México y el Atlántico Norte, a una de La Niña, en la que aumenta la probabilidad de este tipo de tormentas.
El académico agregó que el calor extremo suma otro ingrediente al riesgo de la actividad de los ciclones tropicales esta temporada, ya que estas tormentas son alimentadas por las temperaturas cálidas del océano.
La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés) dijo el jueves que hay un 85% de posibilidades de que la temporada de huracanes en el Atlántico, que comienza el 1 de junio, esté por encima del promedio.
En Guatemala, el calor unido a los incendios forestales, hizo que las autoridades tomaran la inusual decisión de prohibir las actividades al aire libre en las escuelas de la capital por la mala calidad del aire.
Belice, El Salvador, Honduras, República Dominicana y Haití, también experimentan temperaturas anormalmente cálidas debido a esta área de alta presión.