El Colegio Médico de El Salvador emitió un enérgico comunicado de rechazo a la recién aprobada «Red Nacional de Hospitales», una iniciativa del gobierno que, según la entidad, centraliza el poder y desmantela la institucionalidad de la salud pública en el país. La ley, aprobada el jueves por los diputados de Nuevas Ideas y sus aliados en la Asamblea Legislativa, traslada el control de los principales hospitales del Ministerio de Salud (MINSAL) a la Casa Presidencial (CAPRES), una medida que ha generado gran controversia en el sector.
La aprobación de esta ley, como ya es costumbre, se realizó con dispensa de trámite y ha sido calificada por el Colegio Médico como un «proceso antidemocrático y falto de transparencia». En su comunicado, la gremial denuncia que no se consideraron las opiniones de los expertos ni de los profesionales de la salud, y que el proyecto se aprobó sin un análisis técnico ni un debate público adecuado.
Los Puntos de Discordia
1. Centralización del poder y opacidad
El principal punto de preocupación es el traspaso del control de hospitales de referencia como el Hospital Rosales a la Presidencia. El Colegio Médico argumenta que esta medida convierte al sistema de salud en una herramienta política, restándole autonomía y capacidad de gestión al MINSAL, el ente rector por ley. Se teme que las decisiones se tomen con base en criterios políticos, en lugar de científicos o de necesidad pública.
2. Exclusión de los profesionales locales
Otro punto de rechazo es la disposición de la ley que permite la contratación de personal médico extranjero con contratos de 10 años, sin la necesidad de homologar sus títulos o de cumplir con las mismas regulaciones que los profesionales salvadoreños. La gremial médica considera que esta medida es una «afrenta» a los médicos locales, que han dedicado años de estudio y servicio al país, y una amenaza a la calidad de la atención médica.
3. Amenaza a la práctica médica privada
La ley establece, además, que los médicos contratados por la nueva red no podrán trabajar en el sector privado. El Colegio Médico critica esta medida, calificándola como un «castigo» para los profesionales salvadoreños, quienes a menudo complementan sus ingresos con la consulta privada. La entidad asegura que la exclusividad laboral, sumada a los bajos salarios en el sector público, hará que muchos médicos opten por dejar el país, provocando una fuga de cerebros.
Llamado a la acción
El Colegio Médico ha hecho un llamado a la sociedad civil y a la comunidad internacional para que se mantengan vigilantes ante los cambios en el sistema de salud salvadoreño. La entidad ha anunciado que está analizando la posibilidad de presentar un recurso de inconstitucionalidad ante la Corte Suprema de Justicia para frenar la entrada en vigor de la ley.