Una orden de detención provisional contra el exdiputado y excandidato presidencial Rubén Zamora, ha desencadenado un intenso debate en el ámbito político y social del país. Diversos actores han levantado la voz, sugiriendo que esta medida legal constituye una “persecución política” motivada por la postura crítica de Zamora frente al Gobierno de Nayib Bukele.
La resolución, vinculada al caso de la supuesta masacre de El Mozote en 1981, también incluye al expresidente Alfredo Cristiani y exdirectivos de la Asamblea Legislativa de 1993, entre ellos Zamora, reconocido por su posición crítica hacia el actual Gobierno.
La jueza Mirtala Portillo, encargada del proceso, argumenta que estas personas habrían encubierto a los procesados mediante la promulgación de una ley de amnistía en 1993.
Celia Medrano, candidata a la vicepresidencia por el partido Nuestro Tiempo (NI), ha expresado su preocupación, calificando la orden como un indicativo de “ignorancia de hechos históricos constatables”.
Además, señaló la posible instrumentalización del sistema judicial con fines políticos por parte del Gobierno actual.
Es importante recordar que en 1993, la Asamblea Legislativa aprobó la ley de amnistía, la cual fue declarada inconstitucional en 2016 por la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia.
Más críticas
La orden de detención ha suscitado críticas adicionales.
Medrano sugiere que esta medida puede ser una reacción a la inclusión de tres funcionarios del Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP) en la lista de “actores corruptos y antidemocráticos” de Estados Unidos.
La hija de Rubén Zamora, la cineasta Marcela Zamora, ha manifestado en su perfil de Facebook que su padre es objeto de una “persecución política”. En su publicación, destaca la trayectoria de más de 40 años de carrera política y diplomática de su progenitor, subrayando su compromiso con el servicio a los ciudadanos salvadoreños.
Rubén Zamora, quien fue vicepresidente de la Asamblea Legislativa y candidato a la Presidencia por el FMLN en 1994, así como embajador de El Salvador en Estados Unidos y la India, actualmente forma parte del movimiento Resistencia Ciudadana.
Este movimiento ha cuestionado la candidatura a la reelección inmediata de Bukele, alegando su inconstitucionalidad.
La situación continua generando tensiones en el ámbito político salvadoreño, mientras la opinión pública sigue atentamente el desarrollo de este caso.