Las lluvias contínuas que afectan a El Salvador desde la semana anterior dejan múltiples afectaciones, incluyendo 11 muertes y más de 1,900 albergados, mientras se espera que las precipitaciones comiencen a disminuir de manera gradual a partir del miércoles.
Las zonas oriental y occidental del país son las que más afectadas se han visto y en las que las lluvias han sido más intensas e ininterrumpidas.
Viviendas abnegadas, ríos desbordados, cultivos inundados, árboles caídos y carreteras obstaculizadas son las principales afectaciones registradas en algunos lugares del occidental departamento de Ahuachapán, uno de los más golpeados por las precipitaciones.
Ahuachapán registra la crecida del Río Paz que divide a El Salvador de Guatemala, aunque aún no se ha detenido el tránsito de mercaderías entre ambos países.
Las lluvias que afectan a casi la totalidad del territorio salvadoreño, de acuerdo con el titular del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), Fernando López, han provocado la muerte de al menos 11 personas, entre estas dos menores de edad, y dejado cinco lesionados.
También se registran alrededor de 200 calles y carreteras obstaculizadas, 300 árboles caídos, 69 viviendas total o parcialmente afectadas y cerca de 50 deslizamientos de tierra, de acuerdo con datos del Ministerio de Obras Públicas.
Algunos de estos deslizamientos de tierra sucedieron en la calle que conecta a los municipios de Jujucla, Concepción de Ataco y Tacuba, todos pertenecientes a Ahuachapán y parte de la turística Ruta de Las Flores.
El Salvador se encuentra en alerta roja desde el domingo.
Autoridades del Sistema Nacional de Protección Civil, integrado por varias instituciones gubernamentales, informaron el martes de que la cifra de personas albergadas supera los 1,900 y que se encuentran en más de 60 espacios adecuados para su protección.
Una de las principales amenazas durante la época lluviosa son los deslizamientos de tierras y las inundaciones a causa del desbordamiento de ríos.
El ministro de Medio Ambiente señaló que se espera que las lluvias disminuyan el miércoles pero que es posible que para el jueves o viernes se presenten nuevas precipitaciones producto de otro sistema de baja presión que se está fortaleciendo en el golfo de México.